La gran temporada de Damjan Rudez no ha pasado inadvertida en el continente; menos aún con el CAI disputando la Eurocup y el crota luciéndose en el escaparate que supone la segunda mejor competición europea. Varios equipos de la Liga turca han puesto sus ojos en el alero caísta y barajan la posibilidad de incorporarle la próxima temporada. Rudez, a quien le queda todavía un año de contrato, ya pudo haber salido del CAI la temporada pasada, puesto que recibió varias ofertas para marcharse, pero continuó en el equipo zaragozano por deseo expreso.
El croata está a gusto en el CAI, donde disfruta de un equipo de nivel medio sin grandes exigencias pero con buenos resultados, de un club bien organizado y que paga al día y de una ciudad tranquila y agradable. No obstante, su gran rendimiento este año hace casi inevitable su salida el próximo verano, ya que equipos importantes le tienen en su agenda. Más de un factor favorece además una operación en la que el croata acabe en Turquía. En primer lugar, la competición turca es una de las que más dinero mueve en el baloncesto europeo en la actualidad y las posibilidades económicas de sus equipos son superiores a las de la mayoría de los conjuntos del resto del continente.
EL PODER DE TURQUÍA Por otra parte, como se ha visto con la reciente marcha de Giorgi Shermadini al Olympiacos, el CAI no tiene problemas para vender a sus estrellas y continuar así con la política que tan bien ha conducido al club en los últimos tiempos, según la cual la entidad compra jugadores baratos, espera a que se revaloricen y luego los vende a un mejor precio. Héroe en --y de-- Zagreb con un triple que le dio al CAI la victoria ante el Cedevita y también en los instantes decisivos de los cuartos de final en Málaga ante el Unicaja, Rudez está completando una temporada notable. Pese a un mal inicio tras llegar lejos de su mejor forma del Eurobasket, el alero se ha convertido en uno de los puntales del CAI, con un gran acierto en los tiros de tres y, además, siendo un especialista en los momentos clave.
