lgo debe tener Paulinho si la secretaría técnica del Barça considera que este brasileño de 29 años es una de las pieza que necesita el equipo de Valverde para enderezar el rumbo. Con este centrocampista, el conjunto azulgrana gana potencia en el centro del campo, un futbolista todoterreno de ida y vuelta entre las áreas que tanto sirve para ejercer la presión y tareas de contención como para sumarse al ataque entrando desde la segunda línea o sacando rédito a su potente disparo. Eso sí, virtuosismo y toque, muy poco.

TITULAR CON BRASIL

Paulinho, titular indiscutible en el actual once de la selección de Brasil, vuelve a disfrutar de una oportunidad inimaginable porque ni en sus mejores sueños visualizó que pudiera jugar en el Barça, en lo que será su segunda incursión europea. Ya lo hizo en Inglaterra, en el Tottenham, donde entre el 2013 y el 2015 pasó con más pena que gloria (67 partidos, 10 goles y 7 asistencias). Desde entonces, ha jugado en la Liga china, en el Guangzhou Evergrande, que pagó 14 millones al club inglés, donde cambió la exigencia de un gran campeonato por una ficha multimillonaria de la mano del técnico Luiz Felipe Scolari.

Paulinho, forjado en el Audax Sao Paulo, ha jugado también en Lituania y en Polonia, y su mejor etapa la vivió en el Corinthians, donde conquistó la Copa Libertadores y el Mundial de Clubs (ganó la final al Chelsea, 1-0). Su buena labor en el conjunto brasileño fue lo que despertó el interés del Tottenham, que pagó 20 millones a la entidad brasileña, cifra que ahora se dobla con su llegada al Barça y con cuatro años más de desgaste en sus botas.