La nieve y el mal tiempo obligaron a Carlos Pauner a darse la vuelta en el primer intento de hollar la cima del Gasherbrum I (8.068 metros) para regresar al campo base, donde ha pernoctado esta noche. La expedición tuvo que dar media vuelta ante las intensas nevadas y las continuas avalanchas, que habían borrado la huella abierta días antes haciendo más duro el ascenso. A la expedición, comandada por el jacetano junto a los vascos Raquel Pérez y Guillermo Barbier, les quedan ahora 12 días para intentar alcanzar la cima del G-I y el G-II, si mantienen su propósito inicial, antes de emprender el viaje de regreso a Islamabad para tomar el avión de vuelta el próximo 1 de agosto.

Los tres montañeros aguardan ahora a que salga el sol en el Karakorum, pero las previsiones indican que el temporal perdurará, al menos, los próximos cuatro días. Pauner salió la madrugada del pasado día 11 hacia el campo dos, que ya estaba perfectamente equipado tras las aproximaciones anteriores, y el día siguiente continuó el camino hacia el tercer campo de altura para intentar el ataque a la cima la madrugada del 12 al 13. La nieve y el viento han acompañado a los montañeros desde que llegaron al campo base, el día 9, y les han dificultado las labores de porteo y preparación de los campos de altura.

Carlos Pauner está intentando sumar dos ochomiles más a su lista, en la que ya figuran el Broad Peak, el Makalu, el K-2 y el Kangchenjunga, dentro de su proyecto de hollar las catorce cimas más altas del planeta. Este es su primer intento de ascender el G-I y el G-II, después de tener que perderse la expedición que había preparado el año pasado (en la que finalmente participaron Javier Barra, Isabel Santolaria y Javier Serrano, siendo éste el único en alcanzar la cota máxima del G-II) tras las congelaciones sufridas en el Kangchenjunga después de pasar tres días desaparecido.