El Pirineo está repleto de historias, leyendas, mitos y milagros. El ascenso anual cada cinco de agosto a la Gran Facha, la cumbre fronteriza de 3.005 metros situada en el valle de Tena une a los montañeros franceses y españoles y rememora la increíble aventura de Maite Chevalier un 14 de octubre de 1941. El próximo martes, y si el tiempo no lo impide, se volverá a ascender la montaña partiendo del refugio Wallon. La cima la preside una hornacina con la Virgen de las Nieves, la patrona de Sallent de Gállego. Es en lo más alto del monte donde se oficiará una misa.

Chevalier era una joven de Tarbes que subió a la Gran Facha. Bajo la mirada de su marido tuvo un dramático descenso. Al fallarle un escalón tallado en la nieve, se deslizó cabeza abajo. Su piolet se rompió y quedó la parte superior sujeta a su muñeca. En su descenso, este trozo acertó a clavarse en el único agujero que había en la nieve fresca y logró detener así la caída hacia el vacío.

Sus compañeros atribuyeron su increible salvación a la intervención sobrenatural de la Virgen. Por este motivo decidieron erigir en la cumbre una imagen de Nuestra Señora de las Nieves. En agosto de 1956 la capilla fue bendecida y se celebró la primera misa. Desde entonces cada año suben peregrinos, incluso ascendió en 1999 Jacques Perrier, el obispo de Tarbes-Lourdes.

Nuevo presidente

La Asociación de los Amigos de la Facha, que se definen como peregrinos de las cumbres, han sido fieles a la cita desde entonces. Hasta el año pasado el presidente de la asociación era el padre Pedro Estaún. Pero el sacerdote de Biescas dejó Aragón al ser destinado a Ginebra. Estaún tenía claro sus sustituto. "Es Javier Martínez Mallén, un joven de Huesca de 29 años que ha acabado la carrera de Derecho y que poco después entró en el seminario. Si todo marcha bien, podrá ser ordenado sacerdote dentro de dos años", indicaba. Por parte frances su presidente es Jean-Marc Brasseur.

Martínez desborda entusiasmo por todos los poros de su piel. En junio publicó el boletín anual de la asociación y ahora trabaja en los meses estivales en un hotel cercano a la plaza del Pilar. El oscense tiene todo preparado para comenzar la expedición aragonesa que comenzará la marcha hasta el refugio Wallon la mañana del próximo lunes desde el Balneario de Panticosa. Partirán ocho montañeros y desde el refugio de Respomuso también acudirán más senderistas. "Desde Panticosa se sube la cuesta del Fraile, los lagos de Bachimaña y el collado de Marcadau, a 2.541 metros. Después se desciende hasta el refugio de Wallon", explica Javier Martínez.

La tarde del lunes se oficiará una misa en la capilla anexa al refugio de Wallon. "Se espera que nos juntemos 60 montañeros. Luego habrá una cena comunal y se cierra la jornada con una velada en la que se cantan las melodías típicas de las excursiones. Los franceses cantan bastante mejor que los españoles porque tienen más cultura musical", dice con ironía Martínez.

El martes llegará el gran día. Si respeta la climatología, la misa se celebrará en la cima de la Gran Facha. "Pero si está nuboso, se hará en el collado. Si hace mal tiempo, directamente no se subirá al collado de la Facha. Pero eso ha ocurrido pocas veces". Del refugio se partirá a las siete de la mañana. "A las nueve y cuarto se bendecirá el material de montaña en el collado. Allí coincidiremos con los que hayan dormido en Respomuso. Después se sube a la cima en una ascensión de algo más de una hora". Este año impartirá la Eucaristía en la cima el obispo de Lourdes. "En la cumbre estaremos un poco apelotonadas puesto que es bastante pequeña. Tras la misa se tendrá un recuerdo a los fallecidos en la montaña. Además se hará un rito de acogida a los que han superado por primera vez los 3.000 metros de altitud", concluye.