El eslovaco Peter Sagan tiene la posibilidad de lograr su tercer maillot arco iris consecutivo, una circunstancia que atrae toda la atención previa a la prueba en línea Élite masculina que se disputa hoy para cerrar los Campeonatos del Mundo en Ruta (Noruega).

Será en Bergen cuando el doble campeón del mundo intente volver a tener éxito sin contar con un equipo poderoso y además con menos efectivos (seis) que las selecciones más importantes (nueve). Así, con la ayuda de su hermano Juraj y los casi desconocidos Erik Baska, Maek Canecky, Michael Kolar y Patrik Tibor, Sagan intentará hacer valer, como en Richmond 2015 y Doha 2016, su enorme clase para enfundarse otra camiseta de campeón del mundo.

No se presume fácil su tarea ante el poderío de selecciones como las Bélgica, Holanda, Francia, Italia, Gran Bretaña, Australia e incluso la local Noruega sobre un recorrido que, viendo las carreras anteriores, parece más para rodadores que para sprinters o escaladores. Quizás para clasicómanos que dominen las cronos.Menos opciones se le barrunta a una España muy debilitada por la baja del seis veces medallista Alejandro Valverde, que acumula dos platas y cuatro bronces. Los de Javier Mínguez España pondrán sus esperanzas en buenos corredores, pero no figuras, como los murcianos Luis León Sánchez y José Joaquín Rojas y el conquense Jesús Herrada, en un equipo que completan Jonathan Castroviejo, Imanol Erviti, Gorka Izagirre, Marc Soler, David de la Cruz y Lluis Mas.

JÚNIORS y Féminas // Mientras, Chantal Blaak consiguió rematar ayer el gran trabajo de todo el equipo de Holanda y se llevó la medalla de oro en la carrera en línea Élite Féminas de los Campeonato del Mundo de Ciclismo en Ruta. En la modalidad masculina se proclamó campeón del Mundial júnior el danés Julius Johansen en la prueba en línea. Pese a todo su poderío, la selección italiana se acabó llevando la plata y el bronce gracias a Luca Ratelli y Michele Gazzoli.