Tras un "aburrido" retiro de dos años --"podía estar en casa o hacer lo que quisiera, pero todo el mundo estaba ocupado y al final siempre iba a jugar unos hoyos solo", ha relatado sobre su vida tras los Juegos de Londres 2012--, Michael Phelps decidirá este fin de semana si abandona definitivamente esa existencia sin obligaciones y se prepara para Río 2016. Todo dependerá de sus resultados en los Campeonatos de natación Estados Unidos, que se disputan en Irvine (California), pero a tenor de lo que se ha visto este miércoles (madrugada del jueves en España) mucho tendrá que mejorar en los próximos días.

A sus 29 años, el mejor nadador de la historia (atesora 22 medallas olímpicas, 18 de oro) ha finalizado séptimo en la final de los 100 metros estilo libre llena de grandes figuras, como Nathan Adrian, actual campeón olímpico de la especialidad, que ha ganado la prueba (48,31 segundos); Ryan Lochte, que se ha alzado con el segundo puesto (48,96), y Jimmy Feigen, que ha sido tercero (48,98). Phelps ha parado el cronómetro en 49,17 segundos.

Pese a este revés, Phelps todavía tiene oportunidades de clasificarse para los Campeonatos Pan-Pacífico, que se celebran a finales de mes en Australia, la primera oportunidad de representar a Estados Unidos desde que se retiró: este viernes nadará los 100 metros mariposa --la distancia para la que más se ha preparado desde el pasado octubre--; el sábado, los 100 metros espalda, y el domingo, los 200 metros estilo. El objetivo es estar presente en los Mundiales de Rusia 2015, como paso previo a los Juegos.