La carrera de Silverstone del domingo pasado fue suspendida por el estado de la pista y los pilotos utilizaron las redes sociales para pedir perdón. «Pido disculpas a los miles de aficionados que han venido al circuito y han pasado cinco y seis horas de frío y lluvia, así como también a los que esperaban en casa ante el televisor», comentó Álex Rins, que estuvo a punto de sufrir otro gravísimo accidente dos segundos antes que Rabat, en el mismo sitio, teniendo que tirarse de su Suzuki a casi 200 kms/h. al sufrir aquaplaning y no poder detenerla, «pero tuvimos que pensar en nuestras vidas. Se había hecho un mal trabajo en la pista».

Más o menos, lo que señaló Márquez el domingo: «Alguien en la reunión dijo ‘es solo una carrera, dentro de quince días hay otra en Misano y vida solo tenemos una’. Estoy de acuerdo con ello». Pedrosa también señaló: «Lo siento, en Misano habrá espectáculo».

No deja de ser curioso que, en medio de una lluvia de mensajes de todos los pilotos, el australiano Jack Miller, el único, según todos sus compañeros que quería correr, señalase que no era el único. «También Johann Zarco quería correr», señaló en declaraciones a Sky British Telecom (Inglaterra). «Yo creo que las condiciones eran imposibles», dijo a Movistar MotoGP TV el francés, que, cuando le dijeron que Miller había dicho que él también era partidario de correr, dibujó dos grandes balones de fútbol con sus manos en el aire y añadió: «Ése tío tiene dos pelotas así».