El atleta paralímpico sudafricano Oscar Pistorius ha acudido este lunes por primera vez al centro médico de Pretoria donde será sometido a un examen psiquiátrico para establecer si un supuesto trastorno de ansiedad influyó en su comportamiento cuando mató a tiros a su novia, la modelo Reeva Steenkamp. El deportista ha llegado al Hospital de Weskoppies hablando por teléfono en el interior de un vehículo negro, ante el asedio de los fotógrafos y cámaras de televisión y entre fuertes medidas de seguridad, y no ha realizado ninguna declaración.
La jueza que juzga al velocista por asesinato, Thokozile Masipa, anunció el martes pasado que Pistorius deberá presentarse cada día a las nueve de al mañana durante un mes en el centro médico, donde permanecerá hasta las cuatro de la tarde bajo la observación de tres psiquiatras y un psicólogo clínico. Los psiquiatras han sido elegidos por el tribunal, el hospital y la defensa.
Garantizar un juicio justo
La magistrada, que ha aplazado el proceso hasta el 30 de junio --cuando se reanudará con los resultados del examen mental--, dispuso que el deportista se sometiera a observación mental a petición del fiscal Gerrie Nel. El ministerio público presentó dicha solicitud tras la declaración de una psiquiatra, llamada como testigo por la defensa, que aseguró que el acusado padece un trastorno de ansiedad generalizada que pudo afectarle la noche del crimen.
La defensa se había opuesto al examen, al considerar que su cliente es plenamente responsable y capaz de discernimiento pese sufrir un trastorno de ansiedad que, según la psiquiatra que testificó, se remonta a su infancia y adolescencia, a causa de su discapacidad y del divorcio de sus padres. Sin embargo, Masipa decidió someter a Pistorius a evaluación psiquiátrica para corroborar si era plenamente responsable de sus actos cuando cometió el crimen y garantizar así "un juicio justo".
Casi tres meses de proceso
El proceso comenzó el pasado 3 de marzo en el Tribunal Superior de Pretoria, y debía durar, en principio, unas tres semanas. Pistorius ha confesado haber matado a tiros a través de la puerta del retrete de su casa de Pretoria a Steenkamp, la madrugada del 14 de febrero de 2013. El acusado, de 27 años, alega en su defensa que disparó a su pareja, que entonces tenía 29 años, por error y presa del pánico, al confundirla con un ladrón.
Por su parte, el fiscal acusa al corredor de matar intencionadamente a su novia después de una supuesta discusión que dicen haber escuchado varios vecinos llamados a declarar por Nel. El cargo podría costarle la cadena perpetua al atleta, que se convirtió en Londres 2012 en el primer atleta de la historia con las dos piernas amputadas en competir en unos Juegos Olímpicos.
