Jesús García Pitarch, que el pasado 30 de junio dejó de ser director general del Real Zaragoza tras haber sido despedido por Agapito Iglesias a pesar de estar ya al frente de la entidad los empresarios aragoneses, consiguió una sustancial mejora en el contrato televisivo del club en una de sus últimas gestiones. El Zaragoza iba a percibir ya la pasada campaña 2,5 millones de euros, pero al final ha cobrado 4 millones, lo que supone un 60% más. Sin embargo, solo ha recibido 2,4 millones, puesto que en la campaña 2012-13 ya había cobrado 1,6 millones a cuenta del contrato que todavía no había entrado en vigor. Por ese motivo, en el curso finalizado el pasado 30 de junio, el club aragonés solo debía ingresar inicialmente 900.000 millones y al final ha recibido otros 1,5 más por el nuevo contrato, lo que supone un total de 2,4 millones.

La próxima temporada, en la que el Real Zaragoza volverá a militar en Segunda División, el club aragonés cobrará de nuevo 4 millones de euros por los derechos de televisión. A la campaña siguiente (2015-2016), si el Zaragoza juega otra vez en la categoría de plata, recibirá la misma cantidad que el equipo que más vaya a cobrar de Segunda División. Mientras que si estuviera en Primera División recibiría 26 millones de euros por los derechos de televisión. Lo que supondría un millón de euros más con relación al anterior contrato.

Ese contrato televisivo ha sido utilizado ahora como aval por los empresarios que ahora tienen el control accionarial del Real Zaragoza para tratar de que Hacienda les apruebe el calendario de pagos que han presentado para liquidar la deuda que el club tiene con el fisco y que asciende a 29 millones. El club se ha comprometido a saldar toda la deuda en el momento que se consiga el ascenso a Primera.