Son los tres mosqueteros de la escalada de dificultad en Aragón y forman parte de este exclusivo club. Dani Fuertes y Dani Moreno son zaragozanos y Pedro Bergua de Huesca. Han conseguido el máximo grado en la comunidad. Es un 9a. Gracias a su concentración, su fuerza, su explosividad y su resistencia lo han conseguido. Pero quieren seguir superando sus límites. El trío logró su Óscar de la escalada de 9a en el mismo sitio, en las paredes de Vadiello. El último en conseguirlo fue Bergua. Era el primer 9a en su currículum. «La ruta se denomina SuperNowa y es increíble. Cuando la veía probar a Dani Moreno, que fue el primero en hacerla, me parecía algo del otro mundo poder subir por ahí algún día», explica el escalador de Peña Guara.

Dani Fuertes y Dani Moreno son dos escaladores con una amplia trayectoria. Son dos deportistas polivalentes que realizan desde hace muchos años competiciones, escalada deportiva en roca y en grandes paredes. Fuertes ya lleva en su trayectoria once vías en 9a y Moreno se queda en cuatro.

Fuertes subió un escalón más y hace 18 años abrió una vía de una dificultad aún mayor. Es un 9a+. «La hice con Alejandro Jiménez. Tenía entonces 20 años. Es un techo de 40 metros de recorrido y de 30 de desplome. Es una escalada típica en Rodellar». Hace dos años la pudo encadenar, es decir, escalarla toda de una vez. «Hace 18 años no tenía el suficiente nivel. Es muy larga y me costó hacerla 45 minutos». La bautizó como No pain no gain. «Es algo así como sin sacrificio no hay victoria. Está relacionado con la vía y la persona con la que la abrí. Alejandro Jiménez se tatuó el nombre en el pecho», explica Fuertes. En Rodellar también hay proyectado un 9b.

Dani Moreno encadenó su último 9a en noviembre, en las hoces del Tajo en Cuenca. «Son paredes de caliza. Tienen 25 metros de longitud y es de agujeros con un bloque. Prima mucho la resistencia y no hay techos como en Rodellar», afirma. Estuvo diez minutos colgado en la vía. «No la equipé yo. Tenía ya cinco o seis ascensiones. Para hacerla hay que estar en forma. Prima la fuerza y la resistencia». Los que la equiparon la llamaron Seta Total.

Bergua se dedica, como sus compañeros sobre todo a la escalada deportiva. «Me gusta escalar en todas partes, pero las vías que tenemos en Huesca, gracias a nuestros buenos equipadores, me tienen enamorado». Tiene un objetivo claro. «Mantener el equilibrio que me permita llegar a todo y estar en forma para escalar», dice Bergua.

Moreno tiene 31 años y es una institución de este deporte en Aragón. «Empecé a escalar con cinco años en Daroca y llegué a ir a varios Mundiales de escalada deportiva. De las actividades en grandes paredes destacaría las rutas en las Tres Cimas de Lavaredo», indica Moreno. Fuertes empezó a escalar a los 14 años. «Me gusta sobre todo la escalada en roca. Viví el montañismo con mi padre. La competición vino después». Fuertes y Moreno son dos escaladores muy diferentes. «Moreno es más de potencia, tiene más fuerza que yo. Empleo otros recursos como la resistencia», dice este deportista de 37 años. Moreno admira de Fuertes su estilo sobre la pared. «Es muy fino y muy técnico porque tiene menos fuerza. Yo escalo peor», reconoce Moreno. Ambos estuvieron escalando grandes paredes en Dolomitas. «Sueño con ir a las grandes paredes de Yosemite, Madagascar y China». Moreno ya conoce el valle de Yosemite. «Tengo idea de volver. Es muy cómodo y no hay que andar mucho hasta el pie de la vía. También quiero ir a China», apunta.