La plantilla, bueno, las plantillas profesionales y aficionados de todas las secciones del Fútbol Club Barcelona no hacen otra cosa que lo que hace todo el mundo que está confinado por la pandemia del coronavirus y, por tanto, no es extraño que, de vez en cuando, periódicamente, los jugadores y buena parte del 'staff' técnico, incluído el bueno del delegado del equipo, el veterano y experto Carles Naval, hablen de sus cosas por videoconferencia.
No es fácil, desde luego, poner de acuerdo a tanta gente pero sí muy necesario para que el mister Quique Setién, que aparece en la imagen el primero a la izquierda, sepa cómo se encuentran sus jugadores y, sin duda, compartir experiencias familiares, profesionales y una larga y amistosa charla de casi 45 minutos para saber del estado de cada uno de ellos y sus familias.
Dembélé y Suárez siguen mejorando
Llevan todos confinados en sus domicilios justamente un mes y ninguno de ellos, ni nadie, sabe hasta cuándo durará el encierro. Es evidente que buena parte de la conversación giró alrededor (de ahí que también estuviesen los preparadores físicos) sobre su entrenamiento y su estado de forma.
En estas reuniones de la plantilla, que son habituales desde que el club decidió enviar a los futbolistas a sus domicilios para evitar el impacto de la pandemia, se habla de los controles a que son sometidos los jugadores con datos de su preparación. Todos ellos se han enterado, lógicamente, de la importante recuperación de los dos lesionados de altura, Dembélé y Suárez.
