La Carrera Popular Ibercaja, que se disputa este domingo a partir de las nueve de la mañana en el Parque José Antonio Labordeta, cumple cuarenta años. La prueba se presentó ayer a los medios de comunicación. Fue en la primavera de 1979 cuando Zaragoza descubrió las carreras populares. Hasta entonces hacer trote estaba poco menos que mal visto y lo que primaba era el fútbol. Fue una mañana del 23 de abril cuando se abrió el fuego a una afición que ha explotado en la última década. Fue la Carrera San Jorge, que impulsó desde la Federación Zaragozana Eduardo Ruiz, su presidente, y un grupo de entusiastas del atletismo entre los que estaban Fernando y Carlos París.

La iniciativa fue un gran éxito. Nadie esperaba que al final se apuntaran más de 5.000 participantes. La carrera de cinco kilómetros comenzó en La Romareda, atravesó el Ebro y acabó en la plaza Roma en un recorrido urbano. Los mejores fueron Javier Cortés, la estrella aragonesa del mediofondo y una popular, María Pilar Pablo. En aquella carrera, la por aquel entonces Caja de Ahorros de Zaragoza era uno de los patrocinadores. Fue con los años, en otoño de 1983, cuando la prueba trasladó su salida y su llegada al edificio central de Ibercaja. El alma mater seguía siendo el popular Eduardo Ruiz como director técnico. Los premios eran magníficos y los ganadores fueron dos leyendas como Manuel Hernández y Montse Abelló. Los años siguientes la prueba contó con ganadores de tronío como Luisa Larraga, Abel Antón, Luis Javier Alonso, Marta Ruata o José Luis Mareca.

NUEVA FILOSOFÍA

Con los años la prueba fue perdiendo su filosofía competitiva y le pasó el testigo a la Carrera Pryca, que contó entre sus participantes con estrellas del fondo mundial. En su nueva etapa, Ibercaja pensaba más en la integración y en la participación. Todos los zaragozanos estaban invitados a la fiesta del deporte, siendo una de las pocas carreras en la que la inscripción era gratuita.

Ibercaja fue cambiando de chip desde el mismo momento en el que la carrera a pie se empezó a ponerse de moda en España. Crecían las carreras de largo aliento como setas y las había de todo tipo. Desde solidarias, 10K, medios maratones, carreras de la mujer, carreras de montaña... Es un fenómeno imparable que ha tocado techo, pero que socializa y es muy saludable. No hay un fin de semana en la primavera en el que Zaragoza no cuente con cuatro o cinco carreras. Fue en 1999 cuando entró en la Popular Ibercaja la Fundación de Disminuidos Físicos de Aragón. Gracias a esta colaboración, la iniciativa se ha convertido en una cita única y diferente por ser, además, una llamada a la solidaridad, a la igualdad y la integración. A lo largo de sus 40 años han participado más de 400.000 personas, desde estrellas hasta populares.

El primer gran acontecimiento del cumpleaños se celebrará mañana en el Patio de la Infanta con una gala en la que se agradecerá a personas, instituciones y asociaciones que han contribuido a que la Carrera Popular Ibercaja se haya consolidado como una de las citas más destacadas en el calendario deportivo de la ciudad.

Se reconocerá a instituciones como el Gobierno de Aragón y el Ayuntamiento de Zaragoza. Por otro lado, a las organizaciones, colectivos y colaboradores y atletas como Eliseo Martín, Montse Abelló, los hermanos García, Isabel Macías, Luisa Larraga, María José Poves y María José Pueyo entre otros. Los dos últimos agradecimientos serán para la Fundación DFA y los empleados de Ibercaja.

El domingo llegará el plato fuerte con la Carrera Popular, que cambia de escenario. Se disputará en el Parque José Antonio Labordeta a partir de las nueve de la mañana con salida y llegada en el Paseo San Sebastián y tendrá una distancia de 5.000 metros. Todos los corredores recibirán un regalo y habrá un sorteo de premios. Y tras el esfuerzo todos estarán invitados a la Fiesta de la Integración en el Parque de Atracciones.