El Zaragoza ganó una semana de tiempo ayer para el fichaje de Movilla, ya que el jugador, que está inscrito en la Intertoto, es baja de última hora para el partido que mañana tiene que disputar el Atlético de Madrid ante el Zlin checo. Si hubiera jugado ese choque, no ficharía por el conjunto aragonés al no poder disputar la Copa de la UEFA. Tanto el entorno del futbolista como el Zaragoza negaron que esta lesión supusiera una prórroga en la contratación del mediocentro, pero así es en la práctica.

Y es que el pelado ya ha decidido dónde quiere estar la próxima temporada. "El jugador piensa más en el Zaragoza que en el Atlético", aseguraban ayer fuentes cercanas a él. La última oferta zaragocista a principios de semana sedujo al centrocampista, que a través de un contrato por incentivos llegaría a cobrar una cifra cercana a los 5,5 millones de euros netos en cuatro años que estaba en sus peticiones.

Sin embargo, las posturas con el Atlético de Madrid no se acercan. El club colchonero sigue firme en su petición de cuatro millones de euros y desde el Zaragoza no se tiene intención de pagar por el traspaso del jugador, por lo que la visión que se tiene en las oficinas de La Romareda sigue siendo pesimista, aunque la petición expresa de Víctor para que el Movi sea el cerebro del equipo pesa de momento más que las dificultades de su fichaje.

Además, desde la entidad temen que el culebrón pueda terminar pasando factura al futbolista en el caso de que regresara a La Romareda. Si no lo hiciera, el recambio está claro: Celades. El Real Madrid no pondría trabas para su salida y el Zaragoza sabe que el jugador, al que le resta un año de contrato, supone un desembolso menor en la ficha. Por él han preguntado Oporto y Olympiakos, pero Celades sigue esperando al Zaragoza.

EL MEDIAPUNTA, CERCA Muchas menos dificultades que el fichaje de Movilla tiene el de Luis García. La reunión en la sede de la Liga de Fútbol Profesional de ayer sirvió para acercar posturas y el traspaso podría cerrarse en unos dos millones de euros a lo largo del día de hoy, con lo que Luis García, que ya tiene su acuerdo cerrado con el Zaragoza y que hasta instó al presidente pimentonero, Jesús Samper, a que aceptara su salida hacia el conjunto aragonés, podría viajar a Nyon a principios de la próxima semana.

La contratación de Luis García no supondría el final de los refuerzos en la delantera, ya que Víctor considera que necesita un ariete de envergadura para que fije a las defensas rivales. Además, también resta por llegar un lateral derecho, pero esa operación es secundaria hasta cerrar la llegada de un mediocentro.