Roger Martí, titular en las últimas siete jornadas, lleva cinco dianas en su cuenta goleadora, las mismas que Ángelo Henríquez y Víctor Rodríguez. En el partido contra el Alcorcón, participó en el primero, metió el segundo y provocó el tercero al ser víctima de un penalti. El delantero cedido por el Levante atraviesa un explosivo estado de gracia de cara a puerta: rubricó la victoria en Las Palmas, hizo el primero en Gijón la pasada semana y ayer puso distancia con un tanto, el segundo, de su marca. Todos ellos ejecutados con voracidad, templanza y estilo.

Ángelo Henríquez es la principal referencia ofensiva del conjunto de Paco Hererra, pero Roger tiene poco que envidiarle en efectividad y en la calidad de los goles que ha firmado. Es importante que un delantero haga su trabajo, pero su labor alcanza un nivel superior si sus goles significan la suma de puntos o inauguran el marcador en un partido.

En este sentido, Henríquez ha sido fundamental antes de quedarse seco y de que la gripe le haya apartado de los encuentros en El Molinón y este fin de semana frente al Alcorcón. El 0-1 en el Alfredo di Stéfano fue suyo (1-2), al igual qe el 0-1 y el 0-2 del triunfo en Mallorca (2-4) y el 1-0 en la visita del Numancia a La Romareda, un partido que se llevaron los sorianos (1-2). Tampoco sirvió de mucho el del equilibrio con el Recreativo, ya que los onubenses terminaron imponiéndose en el Municipal (1-2)

Víctor Rodríguez disparó dos veces ante el Tenerife (1-0 y 2-0), permitió la victoria frente al Real Madrid C (1-2) y la Ponferradina (2-1) y adelantó a sus compañeros en Riazor en una igualada final (1-1) con sabor amargo. Por ahora es el futbolista que más puntos, diez, ha otorgado al Real Zaragoza con su oportuna puntería. Herrera le ha catalogado de revulsivo y así le utiliza.

Roger, quien fue el primer artillero de la temporada con el gol del empate en el Rico Pérez en la jornada inaugural de Liga (1-1), ha ido creciendo de forma progresiva. Pasó del once al banquillo, donde estuvo tres partidos consecutivos sin participar. Su regreso a la titularidad tampoco fue muy feliz pese a que metió el primer tanto contra el Alavés en un encuentro de infausto recuerdo (2-2). Hasta que llegó la cita en Las Palmas.

Su testarazo contra los insulares, un notable ejercicio de decisión y anticipación desde una distancia considerable para rematar de cabeza, le ha situado en otra dimensión, posiblemente desplazando a Henríquez de su intocable condición de 9 fijo. Le dio el triunfo al Real Zaragoza, tres puntos de un gran valor, para después ser fundamental en El Molinón y ayer en su mejor actuación hasta la fecha. R9 está dentro del polvorín con sus pistolas.