Sergio Ramos, defensa del Real Madrid y autor de dos goles, no escondió su alegría. "Es un sueño. La Champions me debía una, sobre todo con el Bayern por el día del penalti y el día de Khan", dijo el zaguero blanco, que hace dos temporadas falló uno de los penaltis de la tanda de la vuelta de las semifinales ante los alemanes. "Los goles son lo de menos. Lo gratificante es el trabajo colectivo. Íbamos a dejarnos la piel y así ha sido. Ha sido un resultado muy justo, un golpe muy fuerte para el campeón y el Madrid esta donde debe estar a nivel mundial", declaró.

Emilio Butragueño, director de relaciones institucionales, destacó que su equipo logró "con todo merecimiento" la clasificación para la final. "Le doy el mérito al Real Madrid. Tenían armas muy peligrosas para hacernos daño, pero el equipo las controló perfectamente".

No había alma ni pasión en el Bayern, que se rindió sin competir como alemanes, mientras su público volvía a casa tras silbar y abroncar a su equipo sin entender qué pasó. "En noches así, mejor no decir nada. Tenemos un entrenador muy competente, no hay que empezar ahora a cuestionarlo todo", contó Rummenigge. "Jugamos muy mal, he tenido varios golpes duros y este es uno de ellos", confesó Guardiola, sin excusas: "La única razón es futbolística. Me he equivocado en algunas cuestiones tácticas, es mi responsabilidad".