El Real Zaragoza vuelve mañana al Alcoraz para enfrentarse a la S. D. Huesca, tras varios años de ausencia en las pretemporadas, en un partido amistoso típico entre ambos conjuntos aragoneses. El encuentro servirá para afinar la preparación de ambos conjuntos inmersos en plena pretemporada y que buscan poner a sus equipos en forma tras unos exigentes planes de trabajo que están llevando a cabo tanto Víctor Muñoz en el conjunto zaragozista, como Tevenet en los oscenses, con jornadas dobles de entrenamientos.

Tanto el Real Zaragoza como la S. D. Huesca tienen ante sí esta temporada, al igual que la anterior, una ardua labor ya que lucharán por volver a la categoría perdida hace dos años, es decir, los maños a Primera División y los altoaragoneses a la categoría de plata, objetivos que se verán dificultados porque las economías de los dos equipos han limitado la confección de las plantillas. Hay interés en las aficiones por ver en acción a los dos equipos aragoneses sobre el césped, aunque sea en pretemporada, y que va a ser posible tras la marcha del anterior presidente Agapito Iglesias, y la llegada de una nueva directiva zaragozista encabezada por Cristian Lapetra, con profundas raíces oscenses. Ello ha permitido que se reanuden las relaciones entre ambas entidades, que anteriormente estaban rotas, por lo que no se desplazaba el Real Zaragoza hasta el campo del Alcoraz desde hace varios años.

El encuentro servirá para calibrar la situación de ambos equipos y sobre todo conjuntar a los jugadores ya que tanto los locales como los visitantes tienen que ensamblar a sus equipos que están muy renovados. El partido se disputará, a partir de las 20.00 horas, en el campo del Alcoraz con precios de las entradas entre los 15 y los 25 euros.