El carrusel empezó cuando el mundo del fútbol comenzó a comprender la dimensión de la crisis económica que la pandemia iba a provocar en el fútbol. El Barcelona, el Espanyol, el Atlético y el Alavés fueron la avanzadilla y los primeros que aplicaron medidas económicas para paliar el desgarro financiero. Lo hicieron con varios ERTE y con rebajas salariales en sus plantillas. El efecto dominó ha sido imparable y, poco a poco, ha ido afectando a prácticamente todo el fútbol profesional. Este sábado por la noche, la Sociedad Deportiva Huesca anunció que había alcanzado «un acuerdo con la primera plantilla para hacer frente a las consecuencias económicas derivadas de la crisis sanitaria y de la suspensión de la competición».

En un comunicado, el club azulgrana explicaba la buena nueva en los siguientes términos: «El acuerdo contempla la reducción de los salarios de los futbolistas, del cuerpo técnico y de los altos directivos en distintos porcentajes, que variarán en función de los escenarios que se puedan plantear sobre el futuro de la temporada». Ahora mismo, el futuro de las competiciones profesionales es una incógnita, marcada por las preguntas sin respuesta que todavía deja abiertas la pandemia en España y a nivel internacional. En cualquier caso, el empeño de LaLiga y de la Federación Española es acabar la temporada cuando sea, incluso jugando partidos en pleno verano y a puerta cerrada si fuera necesario.

«Analizada la situación --explica el club altoaragonés-- y en función de la evolución de la crisis sanitaria, la Sociedad Deportiva Huesca no se plantea hacer un ERTE a la plantilla no deportiva. Por tanto, las rebajas salariales solo afectarán a jugadores y cuerpo técnico del primer equipo y a la junta directiva del club».

En la misma nota, hecha pública a través de los diferentes canales de comunicación oficiales, la entidad azulgrana quiso «agradecer públicamente a sus jugadores y técnicos la buena voluntad, colaboración y responsabilidad que han demostrado al alcanzar estos acuerdos que, sin duda, reducen de forma importante los riesgos para la entidad en caso de que la temporada no pueda concluir». Además, el Huesca también quiso «mostrar su satisfacción por haber podido llegar a un acuerdo, asumiendo entre todos el esfuerzo y anteponiendo el interés de la entidad al particular».

El conjunto azulgrana se une, de este modo, al Real Zaragoza, que recientemente alcanzó un acuerdo con su plantilla, cuerpo técnico y dirección deportiva para rebajar los salarios alrededor de un 25%. El conjunto blanquillo también ha aplicado un ERTE para su personal no deportivo.