Sostiene Mauricio Pellegrino que el éxito de la temporada es que el Alavés se mantiene en Primera, pero quizá el técnico argentino minimiza el valor que se le debe dar a un equipo cosido con 18 fichajes más dos que llegaron en enero de este año. Con esos retales, el conjunto de Vitoria ha cerrado la campaña en noveno lugar y se dispone a jugar su primera final de Copa.
Muy alejado de esas cifras mareantes, el Alavés se ha decantado por la otra cara del fútbol, la de formar un equipo que dignifique este deporte. Y lo ha hecho con cuatro perras y dando protagonismo a todos los jugadores incluidos los seis que se mantienen de la temporada 2015-2016, la del ascenso.
De los 49,3 millones de euros de presupuesto de esta campaña, el club no ha llegado a los seis en gasto en fichajes. Nadas menos que 18 futbolistas llegaron el pasado verano, entre contrataciones y cesiones. A ellos se unieron Óscar Romero, cedido por el Shanghai y Rodrigo Ely, que llegó también a préstamo procedente del Milan, en el mercado de invierno. La contratación más cara fue la de Daniel Torres, un pivote colombiano procedente del Independiente de Medellín por el que se pagaron 3,18 millones de euros. Le sigue en el escalafón de precios Katai, el extremo procedente del Estrella Roja por dos millones.
Marcos Llorente y Theo
Entre las cesiones, los focos se giran hacia Marcos Llorente, el mediocentro cedido por el Madrid. Hijo de Paco Llorente, y sobrino nieto de Gento, tiene asumido que regresará al equipo de Zidane como sustituto de Casemiro. «Ganar la Copa sería la mejor despedida», afirma Marcos. El otro hombre de moda es Theo Hernández, cedido por el Atlético y al que el Madrid ha fichado por 30 millones. «Tiene fuerza, pero con el tiempo tiene que aprender a frenar», le confesaba Pellegrino a Valdano en beIN. Nadie duda del protagonismo del lateral izquierdo en la final, máxime si como todo indica se mide a André Gomes, presumible lateral derecho.
«Estoy muy agradecido a estos chicos y tengo una idea de cómo vamos a jugar», señaló en la previa Mauricio Pellegrino, quien no dio pistas sobre su planteamiento táctico para la final copera. Con esos chicos ha llegado el Alavés a la primera final de Copa de su historia. Quien no estará es el zaragozano Víctor Laguardia, que ha sido recientemente operado de una rotura del ligamento cruzado anterior.
