Una de las voces expertas del vestuario del Casademont calma los nervios antes de debutar el viernes en la Copa de Málaga contra el anfitrión. «Mucha gente habla del cuadro y de que vamos por el otro lado, de llegar a la final… Eso es aventurarnos demasiado. Estamos hablando del Unicaja, de que no somos favoritos y de que jugamos contra el equipo local. Es en lo único que debemos pensar», afirmó el base zaragozano. Rodrigo San Miguel pone los pies en el suelo de un vestuario descarado en el talento pero todavía juvenil en lo competitivo. «Nuestra plantilla a principio de Liga no estaba enfocada a lo que luego ha sido, la suya tampoco. A nivel de presupuesto, de plantilla… A ellos se les supone un estatus superior y encima juegan en casa, por eso son los favoritos», certificó San Miguel.

A nadie se le escapa la envergadura del rival que tendrá este viernes el Casademont. El Unicaja es un histórico de la ACB y un habitual de la Copa del Rey, en la cual no hace mucho tiempo conseguía dar la sorpresa colándose en las fases finales e incluso todavía colea la final de la temporada 2004-2005 ganada al Real Madrid. «Juegan en casa y eso es muy destacable. La mayor parte de la afición va a estar con ellos pero es diferente a la Liga, no tiene nada que ver. Va a haber otras siete aficiones y la nuestra que va a ir con mucha ilusión, muchas ganas y seguro que se va a hacer notar», relató Rodrigo acerca del atractivo de esta competición y de las opciones del Casademont en esta Copa. El equipo cuenta con el precedente del partido de Liga donde el conjunto zaragozano venció por 75-81.

«Tenemos la experiencia previa del partido de Liga, creo que hicimos un grandísimo partido y ganamos claramente, pero no tiene nada que ver. Las sensaciones, el ambiente, la competición... Todo es diferente. Entendemos que venimos de hacer una primera vuelta espectacular pero sin ningún tipo de presión», confirmó el base aragonés. El Unicaja acabó la primera vuelta en novena posición. Acude al torneo en calidad de equipo anfitrión en un momento de transición para el club, con el proyecto encabezado por Luis Casimiro y los fichajes de Jaime Fernández y Darío Brizuela como puntales del conjunto malagueño.

EL RIVAL / «Son un equipo construido para estar siempre arriba, en la Liga les está costando un poco más pero en la Eurocup se han clasificado ya. Son equipos con plantillas súper largas en las que cualquiera que salga al campo puede aportar. Si hay que destacar algo sería esa línea exterior porque tienen muchos puntos, mucha calidad y cualquiera puede hacer daño especialmente Jaime, que lleva muy buenos partidos y será uno de los focos de nuestra defensa para poder parar. Aún así, debemos centrarnos en el momento y hacer nuestro trabajo», avisó el experimentado base.

La Copa es algo diferente, lo sabe el zaragozano, que pudo colarse en la final de la edición 12-13 ante el Real Madrid con el Valencia Basket. El equipo aragonés está inmerso en una temporada histórica y rebosa confianza. Con la mejor clasificación y racha de victorias que ha obtenido el club desde que regresara a la ACB, el equipo es consciente de que tiene una gran oportunidad de hacer un buen papel para grabar su nombre en esta Copa del Rey. Delante tiene grandes nombres pero los jugadores del Casademont se han ganado el respeto de todos los rivales partido tras partido en cada pabellón que han visitado en esta primera vuelta. «No es una quimera pasar la primera eliminatoria. Si pasamos el viernes, veremos qué sucede en la otra eliminatoria de nuestro lado y poco más. Pensar en finales es demasiado. Es verdad que otros años sí parecía que Madrid y Barcelona iban a llegar a la final y que este año no va a pasar. Pero no nos tiene que afectar en absoluto para nuestro partido», aseguró el zaragozano.

Hay entre la plantilla del año pasado y esta muchas similitudes. Tras una gran segunda vuelta, el conjunto entrenado por Fisac realizó unos playoffs magníficos en los que cayó eliminado en manos del futuro campeón de Liga. Se cambiaron algunas piezas pero la ambición y el estilo de juego permanece intacto. «Ha llegado mucha gente nueva a la plantilla, como yo, que llevo tan solo unos meses pero la afición ya lo ha vivido. Para nosotros lo que ha pasado en anteriores partidos no nos afecta», confirmó Rodrigo acerca del último partido, saldado con derrota en Manresa.

El conjunto aragonés ha acostumbrado a su afición a dar su mejor versión en los momentos clave. Nunca ha decepcionado ni ha herido el orgullo de su gente, que ha recuperado su esplendor al abrigo del Príncipe Felipe. La Copa del Rey asegura grandes sorpresas y justos vencedores. El patrón del campeón siempre responde a una gran plantilla, una gran afición y un equipo histórico.