El Mundial-2021 de MotoGP entra en su primer mes de competición. Esta misma semana empezarán a llegar los equipos de Moto3, Moto2 y MotoGP a Catar. El trazado de Losail, en la capital de Doha, será el escenario de los primeros y casi únicos entrenamiento de pretemporada de las tres categorías y, posteriormente, teatro para los dos primeros grandes premios de la temporada, el GP de Catar (28 de marzo) y el GP de Doha (4 de abril).

El veterano piloto italiano Valentino Rossi (Yamaha), de 42 años y poseedor de nueve títulos mundiales, se ha presentado hoy junto a su compatriota, el piloto italinobrasileño Franco Morbidelli (Yamaha), de 26 años, una de las grandes revelación del pasado Mundial-2020, que se adjudicó, de forma brillante, el mallorquín Joan Mir (Suzuki). Rossi, que ha renovado por la fábrica Yamaha pero ha tenido que admitir pasar al equipo satélite de Petrona cediendo su M1 oficial al joven francés Fabio Quartararo, ha reconocido hoy que tiene "unas grandes y hambre tremendas de que empiece la temporada, por supuesto más el primer gran premio que el primer entrenamiento pero".

Volver a ganar

El 'Doctor' ha reconocido que ha cambiado de colores "y los nuevos me gustan mucho", y que la convivencia con su nuevo compañero, Morbidelli, es sensacional "entre otras cosas porque nos pasamos el día entrenándonos en mi rancho de Tavullia y, por tanto, somos auténticos amigos". Rossi ha reconocido que el equipo Petronas Yamaha, de Malasia, lo tiene todo, todo, para poder ganar el título y convertirse en campeón no siendo una estructura oficial. "Ya han ganado un montón de carreras y lo tienen todo para seguir haciéndolo".

El veterano piloto italiano, que no ha podido llevarse, ni mucho menos, a todos sus ingenieros y mecánicos de confianza a su nueva estructura (ya no posee la fuerza de antes, pues lleva 52 grandes premios sin ganar), sí ha confesado que "siento la necesidad de volver a ser el de antes, ganar carreras y tratar de acabar lo más arriba posible en la clasificación final de piloto".