Quince puntos de sutura en el labio y cuatro en el historial deportivo. Así acabó Ricky Rubio el partido frente a Atlanta Hawks. Pese al golpe que recibió en el primer cuarto, el base volvió a la pista, completó 31 minutos de juego y lideró el triunfo de Timberwolves de Minnesota (107-83).

La escasa aportación en canastas, muy desacertado en el tiro ( 1 de 6 en tiros de campo, 2 de 4 desde la línea de personal) quedó compensada em otras aportaciones; por ejemplo, con 10 asistencias y 6 balones recuperados. La puntuación de los Wolves corrió a cargo del alero Corey Brewer y el escolta Kevin Martin (18 puntos), y con la completa actuación del pivot Gorgui Dieng (15 puntos y 15 rebotes). Rubio sufrió muy pronto un golpe al chocar con Mike Scott, el alero de los Hawks, en el primer cuarto. Tuvo que retirarse al vestuario para ser atendido por una herida en el labio superior y luego pudo jugar, cuajando una labor muy notable.

Más llamativa resultó la de Marc Gasol en la victoria a domicilio de los Memphis Grizzlies sobre Utah Jazz (87-91). El pivot de Sant Boi jugó 35 minutos y sumó 18 puntos, desempeñando un papel muy relevante porque su equipo perdía por siete puntos a cuatro minutos del final.

Gasol anotó 7 de 12 tiros de campo y 4 de 5 desde la línea de personal, añadiendo siete rebotes y cuatro asistencias. Más allá de los números está el momento en que protagonizó dos acciones decisivas, recuperando un balón en defensa cuando los Grizzlies acababan de ponerse por delante en el marcador (84-85) y y una canasta a 69 segundos del final que dictaba la sentencia virtual (84-89).

Pau Gasol, en cambio, aun arrastra molestias del vértigo que le obligó a ser atendido por los médicos en un hospital de Los Ángeles y no reaparecerá en los dos próximos encuentros de Los Ángeles Lakers.