Diego Armando Maradona fue uno de los invitados al partido inaugural del Mundial entre Rusia y Arabia Saudí. Pero los agentes no le reconocieron y frenaron su entrada. Además, el argentino está en el foco de la polémica por sus declaraciones sobre las sedes del Mundial del 2026. Maradona expresó su desacuerdo con la elección de México, Estados Unidos y Canadá porque, según él, en esos países no hay pasión por el fútbol.

Todos los jugadores de la selección rusa querían abrazar ayer a Denis Cheryshev, decisivo con sus dos golazos en la arrolladora victoria que logró Rusia en el partido inaugural del Mundial ante Arabia Saudí, por 5-0. Todo eran sonrisas, abrazos y buen ambiente en el entrenamiento vespertino que celebró ayer el conjunto ruso en su cuartel general en Jimki, en las afueras de Moscú. El extremo del Villareal fue quién exhibió la sonrisa más amplia.