El Guerrouj no fue el único campeón marroquí presente en Zaragoza ayer. Said Aouita, el que fuera recordman de 1.500 y 5.000 y campeón olímpico, siguió las pruebas de los competidores australianos, de los cuales es entrenador. El exatleta africano contempló de cerca la carrera de El Guerrouj, su sucesor. Tras la prueba, Aouita se cruzó con el actual campeón mundial y le señaló con los dedos y una sonrisa la mínima distancia con la que había batido a Kipchirchir en la recta final de los 1.500.