Carlos Sainz, nuevo piloto de Fórmula Uno en la escudería Toro Rosso, se mostró ambicioso con su futuro deportivo y aseguró que no le basta con haber llegado a la máxima categoría del automovilismo, sino que la ha alcanzado para quedarse y su objetivo es ser "campeón del mundo algún día" con Red Bull.

"Intentar ganar algo este año está muy complicado, pero llego para conocer y hacer las cosas bien, como se me van a pedir, y dar una buena impresión a Toro Rosso y Red Bull. El principal objetivo para este año es hacer buenos test, aprender mucho y a partir de ahí veremos dónde estamos", dijo Sainz.

Carlos Sainz también habló sobre su nuevo compañero de equipo, el belga Max Verstappen, de 17 años. "Lo conocí el otro día en Abu Dabi. Estábamos de espectadores y nos quedamos una hora charlando. La impresión fue muy buena, mejor de lo que podéis imaginaros y nada de tensión. A los dos nos tocará aprender mucho, ayudar a Toro Rosso a tirar para adelante y desarrollar un coche, que es clave, y luego batirnos uno a otro".

Además, agradeció el apoyo de Fernando Alonso. "El apoyo de Alonso representa lo buen tío que es y lo muy agradecido que tengo que estar porque desde muy pequeño, siempre que ha tenido la oportunidad, ha apostado por mí con palabras muy buenas. Alonso es increíble. Lo de Fernando conmigo ha sido como un cuento de hadas. Cuando le conocí, con seis o siete años, lo veía como un dios".