Lo más posible es que el Casademont Zaragoza viaje a la República Checa para acabar la fase de la Basketball Champions League (BCL) sin tres de sus pilares básicos en sus últimos partidos de la competición. Sobre todo, lo más probable es que Rodrigo San Miguel no visite al Nymburk y que ni siquiera se desplace desde Zaragoza. El entrenador del equipo, Sergio Hernández, advirtió este martes de que el base aragonés todavía «está con la molestia del golpe que tuvo en Canarias, fue bastante fuerte».

El argentino quiso tranquilizar explicando que «por suerte está recuperándose sin problemas, pero por ahora solo puede hacer cosas en línea recta». E insistió: «No tiene nada grave». Pero se quedará fuera de una convocatoria en la que es posible que no entre alguno más de los esenciales. Estos serían Harris y Hlinason. Sobre todo el primero de ellos, ya que el Oveja confirmó que tiene «una fatiga muy pronunciada». El segundo, por su parte, tampoco «se ha sentido bien físicamente», por lo que se espera que, en el caso de que entren en la lista, no tengan tantos minutos como habitualmente.

El Casademont afronta un buen momento para el descanso, ya que está matemáticamente clasificado para la final a ocho y el partido de este jueves solo decidirá si entra como primero o segundo de grupo. Por esto mismo, Hernández apostilló que «hay que elegir dónde va a estar la energía». «El partido es igual, solo hay que plantear con quién se juega porque no se puede hacer sin energía y no vamos a forzar a nadie», expresó. A pesar de esto, incidió en que «los que estén dentro del campo jugarán a ganar» y añadió, de nuevo, que van a ser «inteligentes en saber con quién hacer ese desgaste».

Será por lo tanto la hora de los menos habituales. El preparador explicó que estos jugadores que no tienen demasiados minutos «no se pueden hacer ver pero tienen el nivel». «Los jugadores que no ponemos no tienen la culpa», aseguró el míster y añadió que a él le «encanta» que «tengan minutos». De esta manera, el que entrará en la convocatoria será Javier Justiz, y Hernández aseveró que el cubano «tendrá muchos minutos en este partido».

Además, también podrán sorprender con alguna novedad en el juego: «Hay pequeñas cosas que queremos hacer y que a veces con la urgencia no podemos, las haremos sin que esto sea un banco de pruebas», adelantó. El entrenador también mostró interés en el encuentro contra el equipo checo para dar continuidad a las buenas sensaciones que han tenido en la competición europea.

De hecho, estas son mucho mejores que en la Liga Endesa, donde llevan cuatro partidos perdidos de manera consecutiva. En cuanto a esto, Hernández matizó que «cuando hay dos competiciones las sensaciones pueden ser encontradas» y esto es lo que le está pasando al Casademont Zaragoza en las últimas fechas. «Nuestra participación en la BCL ha sido de la mejores, excepto el partido contra el Bamberg en Alemania», recordó el técnico mostrando lo positivo en contraste con la Liga ACB.

Los puntos débiles

«Despertamos admiración y respeto en los rivales», comentó y añadió que ahora no piensan «en la final a ocho, sino en el partido contra el Nymburg». De esta manera, consideró que tienen que «estar orgullosos de jugar la BCL» y también de haberse clasificado, comentó. Por esto mismo, insistió en que hay que «defender al club cada partido que toque, independientemente de si hay algo en juego o no».

Sergio Hernández también detalló cuáles son algunos de los puntos que les han hecho perder los últimos partidos de Liga. Puso mucho interés en que no saben «soportar los malos momentos». «Yo el primero y muy cerquita, los jugadores», confesó y añadió que «los malos momentos existen». Durante estos hay que «estar tranquilos para poder tener más lecturas». Pero ellos tienen un problema, según el argentino, y este es que se aceptan «mucho en las buenas pero poco en las malas», un aspecto que considera que deben «mejorar».

Además, también expresó que no deberían «necesitar la motivación extra de ganar en la Champions» para los partidos de la Liga, porque «no deben depender de una competición de la otra». De esta manera, tienen que encontrar de nuevo el rumbo en la ACB. Pero, antes, acabar con buen pie la fase de la BCL antes de la final a ocho.