El esquiador Jon Santacana y su guía, el aragonés Miguel Galindo, lograron ayer la medalla de oro en la prueba de descenso para discapacitados visuales de clase B-2 de los Juegos Paralímpicos de Sochi, que se celebró en el centro alpino de Rosa Khutor. Santacana marcó un mejor tiempo de 1.21.76 y el podio lo completaron el eslovaco Haraus y el canadiense Marcoux.

El madrileño Gabriel Gorce, que también compitió en descenso, acabó en la séptima posición. El abanderado español en Sochi consiguió su séptima medalla en su cuarta participación en unos Juegos Paralímpicos de invierno y revalidó el oro conseguido hace cuatro años en Vancouver. Los dos deportistas reconocieron que no esperaban "ni en el mejor de los guiones" poder lograr este éxito. Santacana regresó a la competición a finales de febrero tras recuperarse de una operación en el tendón de Aquiles que le mantuvo algo más de cuatro meses de baja, un tiempo de recuperación inferior al previsto inicialmente, lo que le ha permitido finalmente acudir a la cita de Sochi y conseguir además la primera medalla para la delegación española, la séptima de su palmarés.

"Han sido unos meses complicados. Estar aquí era como un premio, pero cuando llegas y ves que puedes hacerlo bien vas subiendo tu exigencia, pero ni en el mejor de los guiones podíamos pensar en esto. En descenso habíamos trabajado muy bien los últimos años, pero no teníamos claro el estado de forma en el que llegábamos", explicó Galindo. Por su parte, Santacana destacó la dificultad del hecho. "Hemos sufrido un montón, Miguel me iba narrando lo que iba pasando porque hemos salido en la segunda posición". Galindo apostilló: "No me lo creía cuando el último bueno que competía iba a más de 70 de nosotros en el intermedio. Hemos salido a muerte, a dar todo lo que teníamos y ha salido muy bien". Santacana también destacó la buena estrategia que siguieron en la prueba.

"La pista es complicada porque hay varias zonas en las que te despegas, saltas y pierdo a Miguel, pero en la competición tienes que arriesgarte y nos hemos arriesgado", argumentó. Galindo añadió que, tras concluir, no sabían si iban a ganar la medalla. "Hemos visto que íbamos primeros y sacábamos 30 centésimas al segundo; quedaban casi todos por bajar. No teníamos claro si el tiempo nos iba a valer, de hecho pensábamos que no", sentenció el aragonés.