Nadie duda de que el alemán Michael Schumacher, de 35 años, obtendrá hoy (13.30 horas, Tele 5), en Spa, su séptima corona mundial de F-1. Schumi (Ferrari, 1.56.304 minutos), que ayer estuvo a punto de arrebatarle la pole position al italiano Jarno Trulli (Renault) bajo un auténtico diluvio, partirá hoy emparedado entre los dos Renault, ya que el español Fernando Alonso (Renault, 1.56.686), en otra de sus maravillosas vueltas, logró el tercer mejor tiempo en los entrenamientos del Gran Premio de Bélgica.

Se da la circunstancia de que Trulli, a quien hace escasas semanas Flavio Briatore anunció que no seguiría el próxima año en Renault, ha sido el único piloto de la parrilla capaz de derrotar este año a Schumacher al vencerle en Mónaco.

DOS PUNTOS MAS El alemán, triunfador en 12 de los 13 grandes premios disputados hasta ahora, ganará su séptimo título sumando únicamente dos puntos más que su compañero de equipo, el brasileño Rubens Barrichello, el único piloto que, matemáticamente, puede arrebatarle aún la corona. Schumi aventaja a Rubinho en 38 puntos y, al término del Gran Premio de Bélgica, restarán ya sólo por disputarse cuatro carreras (Italia, China, Japón y Brasil), es decir, 40 puntos.

Schumacher, que hace 15 días le otorgó a Ferrari un nuevo título mundial de constructores, el más prestigioso de todos, al vencer en Hungría, persigue hoy, en su circuito talismán, a sólo 80 kilómetros de su casa de Kerpen, un nuevo cetro en el gran premio número 700 de Ferrari. Curiosamente, si el kaiser logra la victoria será su séptimo triunfo en Spa.

Todo parece indicar que sólo la lluvia, presente ayer en los ensayos y que parece que no va a abandonar Spa durante las próximas horas, podría complicarle un poco la vida a Schumi , aunque no demasiado ya que ayer, con más agua que nadie, estuvo a punto de arrebatarle la pole a Trulli, que logró su crono circulando con mucha menos lluvia que la que tuvo que soportar el alemán.

ALONSO, EN BUSCA DE OTRO PODIO Para conseguir su objetivo, Schumacher deberá realizar una buena salida, cosa nada fácil si se tiene en cuenta que partirá junto a un Renault, el de Trulli, y delante de otro Renault, el de Alonso. Los dos pilotos del equipo francés perseguirán el podio, no tanto por ambición y ganas, sino para conservar la segunda posición en el Mundial de constructores, donde aventajan a BAR-Honda por sólo ocho puntos.

"Quiero ganar, claro, me encantaría otro podio, pero nuestra misión", señaló Fernando Alonso, "es defender o aumentar nuestra ventaja en el Mundial de constructores. Tanto Jarno como yo salimos esta vez desde una posición inmejorable y, la verdad, me importa poco que llueva o que el circuito esté seco". El piloto asturiano dijo que su tercera posición de ayer era "un resultado fantástico" y, como Michael Schumacher, cree que será "una carrera espectacular en un marco inmejorable".