Una gran dificultad y una gran esperanza. Así ve Porfirio Fisac el reto que le espera al Tecnyconta Zaragoza mañana en el Olímpico de Badalona. Difícil porque el Joventut completó una gran primera vuelta que le llevó a la Copa y esperanza porque el triunfo puede dar alas al equipo aragonés. «Me gusta vivir el momento pero son de esos partidos que de repente te abren una puerta diferente a un escenario que no esperabas. Son ciertos partidos distintos porque ellos están a un nivel que en casa es muy complicado ganarles y nosotros necesitamos un gran partido contra un gran equipo», explicó Fisac.

El preparador segoviano destacó también lo cerca que está su equipo de lograr el gran objetivo de la salvación, por lo que, a partir de ahí, será el momento de la ambición y de la necesidad de crecimiento. «Este tipo de victorias te puede dar comodidad pero esto depende un poco de la ambición. Tenemos muy bien encauzada la salvación, estamos muy cerquita del número de victorias. Se puede ganar o perder pero nunca perder el grado de empujar, de trabajar, de ambición. La necesidad de seguir creciendo, es lo que domina en este club», añadió el entrenador del Tecnyconta.

Asimismo, Fisac glosó las virtudes de un Joventut que parece haber olvidado los problemas de no hace tanto tiempo, tanto en la clasificación como en la entidad. «Visitamos a un equipo que creo que es el que más se merece estar en la Copa, por méritos de juego y de forma de actuar. Han perdido un partido de los últimos siete en casa y fue por uno contra Baskonia. Ese Joventut que veíamos con problemas lo ha solventado porque tiene dos jugadores perfil Euroliga como Laprovittola y Todorovic. A pesar de la baja de Birgander han podido arañar a un jugador como Delia de Murcia y han dado un salto de calidad. Tienen dos cuatros de mucho nivel, Morgan y Harangody. Interiormente ahora mismo están a nivel playoff», relató el técnico.

El otro punto fuerte de la Penya está en la dirección de juego, así como en el jugador nacional que, a juicio de Fisac, da al equipo un plus de intensidad. «En la línea exterior el ritmo lo marcan los dos bases. Laprovittola está en el top de la competición, es de los dos o tres mejores de la Liga. Y Dimitrijevic es ese joven de cantera que lleva tres años lo suficientemente incorporado como para dar el salto. Tienen una versatilidad de jugadores que nos gusta a los entrenadores porque empujan, aprietan, suben líneas con López Aróstegui, Ventura, Nogués. Es un bloque bien armado, bien estructurado, donde destacan figuras pero los que más nos gusta a los entrenadores son los jugadores que hacen el trabajo adecuado», elogió Fisac. El de mañana será el último partido antes del parón para la disputa de la Copa y de una nueva ventana FIBA de partidos de selecciones nacionales.