El español Nikoloz Sherazadishvili, de origen georgiano y residente en España desde que tenía 14 años, se proclamó ayer campeón mundial en Bakú, logrando así el primer título de la historia para el judo masculino español. Derrotó en la final de menos de 90 kilos al cubano Iván Felipe Silva por ippon en el tiempo extra. El nuevo campeón mundial, de 22 años, ya logró el bronce europeo el pasado mes de abril.

Silva, campeón en abril de los campeonatos panamericanos, fue el primero en adelantarse con un waza-ari, pero el español de origen georgiano empató a solo cuarenta segundos del final de los cuatro minutos reglamentarios. Aún tuvo que emplear Sherazadishvili 2.18 minutos del tiempo extra antes de lograr un espectacular ippon que le dio el triunfo.

El judo español había ganado antes dos medallas de oro mundiales, en el 1991 con Miriam Blasco y en el 1997 con Isabel Fernández, pero nunca un judoca masculino había sido primero.

Así se entiende mejor la gran alegría de Sherazadishvili: «Es increíble. Tuve un sorteo en el que o era campeón del mundo o no hacía nada. He ido combate a combate y estoy muy, muy contento». Para llegar al oro superó a al islandés Egill Blondal por ippon, al ruso Igolnikov, campeón de Europa, por waza-ari, al turco Ozerler y al cubano Asley González, subcampeón olímpico, por ippon. En semifinales se impuso al húngaro Toth y ayer en la final hizo historia ante Silva.