Se quedó algo corto el Atlético hace cinco días en el Vicente Calderón (1-0), pero no por ello ha rebajado una pizca su esperanza de estar en las semifinales de la Liga de Campeones por tercera vez en las últimas cuatro temporadas. No menos esperanzado está el Leicester con meterse entre los cuatro mejores equipos de Europa por primera vez en su historia, lo que dotará al estadio King Power de una atmósfera muy especial, al margen de una temperatura elevadísima para intentar que el campeón inglés haga con el equipo rojiblanco lo que hizo con el Sevilla en octavos.

Le vale al Leicester el mismo resultado que en la vuelta ante el cuadro andaluz (2-0), pero la fiabilidad y seguridad defensiva recuperadas por el Atlético lleva a pensar que el conjunto madrileño continúa siendo tan favorito como antes del inicio de la eliminatoria. No ha perdido ninguno de los 12 partidos que ha jugado como visitante en todas las competiciones en lo que va de año (seis victorias y seis empates) y en las dos ocasiones en que ha encajado dos tantos ha marcado otros dos (con el Athletic y el Eibar).

Simeone pondrá en juego en principio la misma formación del encuentro de la ida, aunque al fin ha recuperado a Gameiro, ausente desde que estuvo con su selección por una tendinitis. La velocidad del francés y su buena sintonía con Griezmann asoman como un factor muy relevante para que el Atlético pueda alcanzar su objetivo ante un rival que está obligado a hacer mucho más en ataque que en el Calderón para exprimir sus opciones.