El Real Zaragoza necesita dar salida este verano a varios jugadores por tener sus fichas muy altas y para intentar ingresar dinero en sus arcas, pero hasta el momento no ha recibido ninguna oferta por ninguno de ellos. En esa situación se encuentran futbolistas como Paco Montañés, Álvaro González o Abraham Minero. El verano pasado ya estuvieron en la rampa de salida Montañés y Álvaro, pero al final no hubo ninguna oferta concreta por ellos para que pudieran irse traspasados. Ambos superan los 400.000 euros de ficha.

Por contra, el Zaragoza sí que ha recibido ya el ofrecimiento de varios jugadores con vistas a la próxima temporada, donde el conjunto zaragocista volverá a militar en Segunda División. El consejero Luis Carlos Cuartero ha mantenido conversaciones con algunos representantes para conocer la situación de algunos futbolistas que pueden interesar al cuadro aragonés. En la entidad zaragocista se encuentran ahora casi todas las gestiones paralizadas por la posible venta del club por parte de Agapito Iglesias, que es el accionista mayoritario de la Sociedad Anónima Deportiva (SAD).

El Real Zaragoza pudo disponer el verano pasado de 6,6 millones de euros para confeccionar la plantilla y el cuerpo técnico, pero el próximo curso tendrá menos de cinco millones de euros para ambas cosas. La Liga de Fútbol Profesional (LFP) decidirá al final con el dinero que cuenta según los ingresos que vaya a tener durante el curso el club aragonés. La LFP ha implantado un duro control económico para los clubs de Segunda División con el objetivo de que puedan sanearse poco a poco. El Zaragoza, por ejemplo, ha tenido esta temporada una importante rebaja de sus ingresos por los derechos de televisión tras el descenso a Segunda División. En la categoría de plata ha recibido 2,5 millones de euros por ese concepto, mientras que en Primera División hubiera ingresado 25 millones de euros por los derechos de televisión.