El abono de temporada de esquí más grande de España es desde hoy una realidad gracias a la unión comercial de la empresa mixta Aramón y de la compañía que gestiona la estación de Candanchú.

Sale hoy a la venta este abono que permitirá a los esquiadores practicar su deporte favorito por más de 300 kilómetros en pistas.

Los detalles de la iniciativa se han dado a conocer hoy en un acto al que han asistido el presidente del Gobierno de Aragón, Javier Lambán; la consejera de Economía, Industria y Empleo, Marta Gastón; y el máximo responsable de la entidad Ibernieve, Fernando de Yarza.

Precisamente Lambán, durante el evento, y según informa el Gobierno de Aragón por medio de una nota de prensa, ha hecho hincapié en la vocación con la que se crea este bono, la de "liderar el mercado nacional de esquí".

Precisamente la extensión de las pistas, esos 300 kilómetros, es el argumento que ha esgrimido el presidente aragonés para resaltar el que, ha dicho, es "el primer dominio esquiable de España".

Los retos que se asoman son, para Lambán, "competir con Los Alpes y el resto de estaciones europeas".

Gastón, por su parte, ha valorado el largo trabajo emprendido para llegar hasta la creación de "Ski Pirineos": 26 meses dedicados a desatascar situaciones que permanecían en litigio desde hace diez años.

Según ha señalado, la rentabilidad económica de la iniciativa se mezclará con la rentabilidad social.

De Yarza, por su parte, ha remarcado que el objetivo a medio plazo pasa por extender acuerdos como el ratificado hoy a otros proyectos.

"Ski Pirineos" es producto del acuerdo comercial de las estaciones de Aramón, pertenecientes al holding de la nieve que conforman Gobierno de Aragón e Ibercaja al 50 por ciento, y de Candanchú, la estación de esquí decana de la nieve en España.

El pase permite esquiar y disfrutar indistintamente de los tres valles del Pirineo aragonés con estaciones de esquí: el valle del Aragón, donde se ubica la mítica estación de Candanchú; el de Tena, con el gran dominio esquiable de Formigal-Panticosa; y Ribagorza, donde abre sus puertas la alpina estación de Cerler.