Juega Suárez. Juega Rafinha, también. Juega Mascherano de central. Y Mathieu, también. O sea, el Barcelona posclásico, tras la caída en el Bernabéu, se articula en torno a Bravo en la portería, con Alves, Mascherano, Mathieu y Jordi Alba en la defensa, con Busquets, Rakitic y Rafinha en el centro del campo, mientras el ataque lo completan Messi, Neymar y Suárez.

O sea, tres cambios en el once inicial que perdió hace una semana en el Bernabéu. Alba entra por Piqué en la defensa, lo que obliga a Mathieu a volver a jugar de central. Rafinha, tras sus problemas físicos, juega en el centro del campo supliendo a Xavi. Y Rakitic también recupera la titularidad por el lesionado Iniesta.