Solo piensan en la victoria. Salir a ganar en Brujas, superar al líder de la Liga belga y ser primeros de grupo. Ése es el pensamiento de Víctor y de la plantilla zaragocista de cara al partido de mañana en el Jan Breydel Stadiom. Este sueño del liderato implica en primer lugar enfrentarse a un tercero de otro grupo en el sorteo para dieciseisavos y con el partido de vuelta en La Romareda, una buena ventaja, sin duda, pero también ganar en moral y en confianza después de la reciente mala racha en la Liga. Un empate en el estadio belga también valdría para obtener el pase, pero obligaría a esperar el resultado del Utrecht-FK de Austria para establecer la segunda o la tercera plaza, mientras que la derrota condenaría al tercer puesto si el Austria no gana y a la eliminación en caso de que se produzca ese triunfo austríaco ante un Utrecht ya desahuciado y sin opciones."Lo que queremos es ser primeros de grupo, dependemos de nosotros y no queremos desperdiciarlo. Es verdad que nos vale el empate para clasificarnos, pero vamos allí para acabar como líderes. Otras veces es importante sólo clasificarse, pero aquí acabar en lo más alto implica una gran ventaja", aseveró Villa, tan ambicioso como acostumbra, mientras que el técnico zaragocista también habló de salir a ganar sin pensar en cuentas ni otras posibilidades, porque, además, el peligro del enemigo, líder destacado en Bélgica, así lo aconseja. "Si vamos a Brujas con la intención de empatar nos podemos ver penalizados con la eliminación", afirmó Víctor Muñoz, con un mensaje que suena a diáfana declaración de intenciones. PRESIÓN AMBIENTAL Y es que en el Jan Breydel espera un rival duro, poderoso arriba y con mucho apoyo de su público, que ya vio cómo su equipo quedaba eliminado en Champions y que no quiere que se repita la historia en la UEFA. Así, las previsiones hablan de una gran entrada, aunque no se llenará el aforo, de 30.000 espectadores: "Ellos necesitan la victoria y tienen que atacar casi por obligación. Además, en Brujas hay un ambiente extraordinario y una grada que anima a su equipo de forma magnífica. Seguro que será un partido vibrante y con dificultades", aseguró el entrenador zaragocista, que valoró muy positivamente el efecto anímico del empate en El Sadar para afrontar el choque vital de mañana.PREFIEREN SER TERCEROS El objetivo es claro: ganar. Pero, ¿y si el Zaragoza no lo logra? El pase está asegurado con el empate y sería como segundo de grupo --lo que implica enfrentarse con un rival eliminado de la Champions con la vuelta en La Romareda-- si el FK Austria no gana por tres o más goles. Si los austríacos lo logran, el puesto sería el tercero y en el bombo tocaría uno de los primeros del resto de grupos de la UEFA con el segundo partido en casa del rival. La plantilla tiene claras sus preferencias. "Yo prefiero ser tercero que segundo, porque un rival de UEFA siempre es menor en teoría que uno que ha caído eliminado en la Champions", recalcó Delio Toledo, mientras que Villa fue todavía más claro que su compañero de equipo: "Si han jugado en la Liga de Campeones es por algo...".

Víctor fue más diplomático, pero también recalcó la pequeña ventaja que implica la medalla de bronce con respecto a la de plata: "Lo primero es clasificarnos. Si somos primeros muchísimo mejor, porque implicaría que hemos ganado y nos daría confianza. Después, me da un poco igual, aunque es verdad que teóricamente es peor ser segundo".

MAXIMA CONVICCION "Pero la única idea es hacer un gran partido y ganar", insiste el técnico. Es la consigna y, a pesar de la dureza del rival y del ambiente, hay absoluta convicción en conseguirlo. Como sentencia Cani: "Si hacemos las cosas bien, seguro que logramos el triunfo". Y así se cumpliría el sueño.