El panorama a principios de julio, cuando El Olivar cumplió la promesa realizada un año antes de abandonar la gestión del Pla-Za, era poco esperanzador. La continuidad del club en la máxima categoría del waterpolo español pendía de un hilo. Pero, dos meses después de que la nueva directiva liderada por José Pajares haya tomado el mando, la amenaza del descenso ha desaparecido y las preocupaciones del conjunto zaragozano vuelven a ser deportivas.

Emilio Bautista afronta su cuarta campaña como técnico del Pla-Za y ya no se conforma con ser el único representante aragonés en la División de Honor. Este año apunta alto: "Queremos mantener el nivel de la temporada pasada, estando entre los ocho primeros e intentando escalar alguna posición para llegar a Europa". El presidente va más allá: "Tenemos que estar entre los cuatro primeros de la Liga y, por supuesto, jugar la Copa". Para ello contarán con la misma columna vertebral, aunque "aún estamos pendientes de que algunos terminen de firmar", indica Bautista. Es el caso de Diego Fumanal, cuyo futuro sigue sin resolverse. Continúan los tres canteranos de la campaña pasada --Santiago Marqués, Eduardo Blasco y Javier Baucells--, a los que se sumarán dos jóvenes del Helios.

Un olímpico en Zaragoza

Destacan las incorporaciones de Miguel Hernando, procedente del Martiánez Tenerife, y Daniel Moro, del Atlético Barceloneta, recién llegado de los Juegos de Atenas. El técnico madrileño, muy satisfecho con estas novedades, lamenta sin embargo la que considera como una "baja muy importante", la del eslovaco Peter Veszelits. David Villarte, Alfonso Marqués, Ibán Martín y Daniel Francisco completan la lista de ausencias. Aunque el club afirma tener cerrada la plantilla, no descartan una incorporación de última hora. El presidente asegura que tanto jugadores como cuerpo técnico han tenido un comportamiento "ejemplar" en los momentos críticos pasados a principios de verano. "Ha habido que realizar un gran esfuerzo para conocer toda la situación. Cuando llegamos nos encontramos con un déficit cero. Nuestra misión ahora es ir encajando la plantilla y los gastos al presupuesto que tenemos", indica. Este asciende a 305.000 euros, de los que alrededor de la mitad proceden del Ayuntamiento de Zaragoza y la DGA. Además, Pajares confiesa que varios olímpicos han llamado a su puerta este verano sin poder hacer efectiva su incorporación. De ahí que, en lo económico, su principal objetivo sea "sanear la tesorería del club para que se autofinancie sin depender de las arcas públicas". A medio o largo plazo, aspira a "crear un equipo de waterpolo que sea una referencia en Aragón".

La pretemporada

El Pla-Za comenzó su preparación la semana pasada y a lo largo de los días se han ido incorporando algunos jugadores con la excepción de Dani Moro, que cuenta con un permiso más amplio por haber disputado los Juegos con la selección española. La pretemporada se desarrollará en Zaragoza hasta el día 13. Santoña, en Cantabria, será el lugar de concentración desde ese día hasta el 19. La puesta en marcha se completará con el Trofeo Ciudad de Zaragoza y "algún otro torneo al que asistiremos como invitados", explica Bautista. El 23 de octubre, el Pla-Za afrontará su primera cita liguera contra el Sant Andreu. Su meta es mejorar la séptima plaza de la pasada campaña, cuando cayó en cuartos de los playoff ante el Sabadell.