La directiva del Tarazona ha remitido oficialmente un escrito a la Federación Española de Fútbol (RFEF) solicitando la plaza que ha dejando vacante el Reus, que ha sido expulsado de la competición debido a sus enormes problemas económicos. El Reus sufrió primero, en plena competición, un descenso administrativo de Segunda A a Segunda B, pero ni siquiera en la categoría de bronce del fútbol español puede tener licencia.

Así, el Tarazona, campeón de liga de su grupo de Tercera, que se vio privado deportivamente del ascenso de categoría en el último instante frente al filial del Alavés, reclama en los despachos la plaza del equipo catalán en el grupo tercero de la 2ª B anteponiendo por encima de todo "méritos deportivos acumulados", como ha confirmado a este diario el presidente de la entidad turiasonense, Aniceto Navarro. "Creemos que somos el equipo que más lo ha merecido. Hay otros que también creen tener méritos deportivos, pero no han sido campeones de liga ni han llegado tan lejos en el tramo final". Probablemente Navarro se refiera sin nombrarlo al Hospitalet, que al parecer también confía en la meritocracia para lograr la plaza del Reus pese a quedar segundo de su grupo.

El Tarazona invoca el artículo 105 e) de los estatutos de la RFEF, donde se detalla que será la directiva del organismo quien determine el modo y la forma en que serán cubiertas las vacantes administrativas. "Hemos sido campeón del grupo XVII con 80 puntos y eliminados en tercera ronda del playoff de ascenso con cinco puntos obtenidos. Nadie de los que no han ascendido tiene esas cifras", insiste Aniceto Navarro.

Sin embargo, la clave del asunto estriba en la subasta que ha abierto durante tres días la Federación Española de Fútbol, mecanismo de elección que merma, "y mucho", en palabras de Aniceto Navarro, las opciones del Tarazona, que se ve incapaz de pelear con gigantes como el Zamora o el Alcobendas, que parecen dispuestos a pujar fuerte económicamente por la plaza. La RFEF ha colocado el listón de salida en 452.022 euros y es más que probable que se llegue a 600.000, una cifra inalcanzable para el Tarazona.

En la temporada 2011-12, el Real Zaragoza compró una plaza en Segunda B para el Deportivo Aragón, que ese año entrenó Juan Eduardo Esnáider. En aquella ocasión había habido muchos descensos administrativos y entonces no hubo subasta. El Zaragoza que presidía Agapito Iglesias abonó a la Federación Española 300.000 euros y se hizo con una licencia en la categoría de bronce..