Todo a una carta. El Teruel y el Ejea se juegan este domingo (18.00) en la última jornada su presencia la próxima temporada en Segunda B. Los turolenses cayeron al descenso la pasada jornada después de la derrota en Pinilla ante el Olot (1-4) en un partido marcado por la expulsión de Aspas en la primera mitad. El conjunto dirigido por Dani Aso acumula 41 puntos en su casillero antes de su visita al Cornellá, al que solamente le vale una victoria para mantener sus opciones de playoff, y tiene que sacar como mínimo un punto si quiere salvar la categoría pero debería estar pendiente de los resultados de Castellón, Sabadell y Alcoyano. «Tenemos que intentar no perder. Ganar casi nos asegura la salvación porque es muy complicado que se den todos los resultados que nos condenarían al descenso», apuntó el entrenador turolense, Dani Aso.

El Teruel tiene el golaverage general perdido con el Castellón -el particular lo tienen empatado- por lo que todo lo que fuese igualar el resultado con ellos, abocaría a la zona roja. Si el Barça B derrota al Castellón en Castalia y el Teruel rasca un punto de Cornellá, los turolenses jugarían el playout por el descenso. Una promoción de la que se podrían librar (en caso de empate) si Alcoyano o Sabadell pierden sus respectivos encuentros ante Conquense y Olot, respectivamente, porque los de Dani Aso tienen el golaverage a su favor. Aunque esta situación es algo improbable porque el Conquense está ya descendido y el Olot certificó la salvación la pasada jornada. Sin embargo, las matemáticas también darían la permanencia al Teruel en un supuesto triple o cuádruple empate con los otros equipos.

Por lo tanto, el Teruel dependería de sí mismo en el 90% de las situaciones si gana y se salva si Castellón, Sabadell, Valencia B o Alcoyano no ganan su partido. «Partimos sin presión como que estamos descendidos y la salvación va a ser un premio. En Navidad si nos hubiesen dicho que íbamos a llegar con opciones a este punto todos lo hubiésemos firmado», afirmó Dani Aso.

Una situación menos anguntiosa afrontan los pupilos de Fernández Romo que tienen la permanencia a su alcance. El Ejea recibe al último clasificado, -sin contar al excluido Ontinyent- el Peralada, y con un empate firmaría matemáticamente la salvación debido a que tiene el golaverage ganado con todos los equipos inmersos en la pelea. Incluso una derrota de los ejeanos les salvaría del descenso si dos del resto de equipos no consiguen ganar su partido, exceptuando al Valencia B al que le serviría un empate. En la situación de que solo no ganase uno de los equipos y el Ejea perdiese, jugarían el playout por el descenso. «El equipo tiene que salir a ganar porque el rival nos va a poner las cosas difíciles y hay que intentar sumar los tres puntos que nos dejen tranquilos», reconoció el director deportivo del Ejea, Néstor Pérez.

A pesar de tener el presupuesto más bajo de la categoría, el club zaragozano está más cerca de la salvación que conjuntos históricos como el Castellón o el Sabadell. «Nadie daba un duro por nosotros al principio de campaña y el club se ha ganado el derecho de poder soñar con la salvación», apuntó Pérez. El Ejea espera el apoyo de su público el domingo para certificar la salvación y por ello sus aficionados no pagarán la entrada a Luchán.