Salvo un cambio radical de la situación, el portero Toño Rodríguez se convertirá hoy en nuevo jugador del Real Zaragoza. El guardameta alicantino alcanzó ayer un principio de acuerdo con el Elche para la rescisión de su contrato y hoy, tras solucionar los últimos flecos, se desligará definitivamente del cuadro ilicitano. Toño, de 34 años, tenía todavía dos años de contrato con su actual club, que continuará este curso en Primera División, pero no entraba en sus planes y por ese motivo ha preferido buscarse una salida. En el Elche tenía una ficha que rondaba los 500.000 euros, aunque en el segundo año que le restaba por cumplir podía prescindir de sus servicios pagándole alrededor de 200.000 euros, y por ese motivo se ha visto obligado a indemnizarle para que se vaya.

El Zaragoza había ofrecido en principio a Toño Rodríguez un contrato para dos temporadas, pero ahora mismo todo apunta a que al final aceptará firmarle un compromiso para tres campañas. También es posible que haya tenido que subirle un poco la ficha para que haya aceptado dejar el Elche y recalar en la disciplina zaragocista. La ficha que iba a percibir inicialmente rondaba los 150.000 euros y ahora podría ascender a unos 175.000 euros. Toño había sido desde el primer momento el guardameta elegido por el club aragonés para reforzar la portería. El portero alicantino ocupará la vacante dejada por Leo Franco, quien, tras finalizar su contrato, aceptó la oferta del San Lorenzo de Almagro para volver a Argentina.

Pese a la llegada de Toño Rodríguez, que se convertirá en el noveno refuerzo incorporado por el Real Zaragoza este verano, Víctor Muñoz podría apostar por el joven Óscar Whalley, con ficha del filial pero ahora mismo como un componente más de la primera plantilla, para el inicio de temporada. El técnico aragonés tiene gran confianza en las posibilidades de Whalley. En la primera plantilla del Zaragoza se encuentra también Pablo Alcolea, a quien el club aragonés pretende ceder, pero tampoco hay que descartar que pueda quedarse sin licencia si al final no se le encuentra una salida y están las 18 fichas de la primera plantilla cubiertas.

De la portería del primer equipo depende también directamente lo que suceda con la del Zaragoza B. Si Óscar Whalley se queda arriba debería llegar otro guardameta para el filial. Este verano se ha fichado a Sergio Sanz, procedente del Lucena, pero se quiere dar salida a David Aroca por superar el nivel medio de las fichas que se han fijado para el Zaragoza B. Otra solución sería que Aroca aceptará rebajarse el contrato para seguir en el filial. Ahora mismo parece que estaría dispuesto a hacerlo.

ESPERANDO A BORJA BASTÓN El Real Zaragoza, por otra parte, también confía en hacerse en las próximas horas con la cesión de Borja Bastón. El delantero madrileño no entra en los planes de Víctor Fernández, técnico del Deportivo de La Coruña, y todo apunta a que acabará recalando en la disciplina zaragocista. El Zaragoza esperaba contar ya esta misma semana con la incorporación de Bastón, pero hasta el momento eso no se ha producido.

Borja Bastón pertenece al Atlético de Madrid, pero el Deportivo podía seguir contando con sus servicios esta temporada. Sin embargo, el cuadro gallego está dispuesto a dejarlo que se vaya este verano y el Atlético no pondría ninguna pega para que pudiera llegar también en calidad de cedido al Real Zaragoza. Por Bastón se han interesado varios equipos de Segunda División, pero tanto el jugador como sus agentes son proclives a que venga al club aragonés.

El delantero madrileño tiene una ficha de 400.000 euros, pero el Zaragoza asumiría lo mismo que el Deportivo, un 25% de esa cantidad. Ese modo solo pagaría alrededor de 100.000 euros. Borja anotó la pasada campaña 10 goles en 33 partidos en Segunda División con el cuadro gallego.