Hay momentos que parecen intrascendentes y que terminan siendo definitivos. Seguramente uno de ellos esta temporada se produjo en Granada. Recuerden. Esa parábola interminable de Shinji Okazaki fue un suspiro de alivio para toda la hinchada pegada al televisor. El 1-3 en el minuto 82 parecía definitivo y definitorio, la primera victoria, la transformación de todas esas buenas sensaciones emitidas en el valor tantas veces escapado. Tantas y aquella. Porque luego llegaría el gol de cabeza de Jorge Molina y el empate de Germán Sánchez… y podría haber sido peor con otro palo de Molina.

Ese día seguramente fue el principio del fin de Míchel. Incluso pese a ganar al Alavés la semana siguiente, la herida de esa victoria arrancada en el descuento fue muy dolorosa para la creencia en sí mismo de ese grupo. Ahora llega la Liga dada la vuelta al Alcoraz. Este domingo, a las 18.30 horas, es el Granada quien visita Huesca. El otro lado de la luna. Quizá sea en este envés donde rescate Pacheta lo perdido bajo el embrujo de La Alhambra. Quién sabe si este puede ser ese punto de inflexión que tanto necesita este grupo para desprenderse por fin de esos ropajes pasados y pesados. Ese equipo que como aquel, que es el mismo con autor distinto, otra vez almacena buenísimas sensaciones, elogios de cambio, alabanzas al juego con sentido y resultados secantes. Porque se mejora pero se sigue parecido en la clasificación.

La excusa de enfrentarse a los grandes no vale pese a que el rival de este domingo no es tampoco un pequeño. Pero sí se acerca a los baremos oscenses en distintas cuadrículas. Es más batible en la teoría. Y en la práctica debe serlo para aguantar ese ritmo que dice que, para conseguir la permanencia, Pacheta debe sumar tres puntos de cada seis en lo que queda. Es decir, que la derrota de Sevilla se remienda con el Granada. Delante quedará el Eibar, ese sí que sí, duelo directo, y otro visitante sin pedigrí de inexpugnable como el Celta de Vigo. Será un tramo decisivo para saber si este Huesca tiene realmente aspiraciones de reacción para recortar los cinco puntos que ahora le distancian de la permanencia. Pero mejor no correr y concentrarse en lo que viene: el Granada.

Lo que viene es un Huesca reforzado en su sentido táctico con Pacheta, en lo anímico y en lo numérico. Porque el entrenador sumará otro elemento a su posibilidad de once. Es el esperadísimo regreso de Sandro. El grancanario ha vuelto a entrenar con el grupo esta semana tras corregir la dolencia muscular que le ha retirado de las convocatorias desde el partido del Betis, justo el anterior a la llegada de Pacheta. Ahora el técnico deberá decidir si apuesta desde un principio con sus servicios o sigue confiando en Okazaki o Escriche como complemento a Rafa Mir, por lo que aseguró en su rueda de prensa Sandro esperará turno.

La otra duda reside en la defensa. Lesionado por una rotura de tibia Gastón Silva, será mínimo un mes baja cuando empezaba a ser indiscutible. El entrenador burgalés debe decidirse entre Insua o dar la oportunidad a Vavro para encontrar un sustituto en la posta zurda de la línea de tres centrales. El resto de huecos parece ya repartidos, salvo sorpresas. Mosquera, que ya toca césped, y Luisinho, más lejos de su regreso, siguen en el dique seco y la continuidad se presenta como la dirección a tomar en el planteamiento y once.

El Granada tampoco será fácil. Hará rotaciones porque viene de ser muy solvente en el inicio de su eliminatoria en Europa League con el Nápoles (2-0). Goleó Yangel, uno de los dos venezolanos con pasado azulgrana, ya que el otro es Machis. Dos zaragozanos (Soro y Vallejo) y un exzaragocista como Luis Suárez completan los conocidos de esta tierra que es Aragón. Eso sí, tanto el colombiano como Vallejo son baja por lesión, una lista que en el Granada completan Soldado, Quini, Luis Milla o Nyeder. El rival es octavo tras un buen inicio pero lleva 5 partidos sin ganar en Liga, es la segunda peor defensa y el penúltimo en la tabla como visitantes, datos para la esperanza oscense.

Alineaciones probables

Huesca: Alvaro Fernández; Maffeo, Pulido, Siovas, Insua, Javi Galán; Seoane, Doumbia, Mikel Rico; Okazaki y Rafa Mir.

Granada: Rui Silva; Víctor Díaz, Domingos Duarte, Nehuén Pérez, Adrián Marín; Yan Eteki, Domingos Quina, Machis, Alberto Soro; Antonio Puertas y Fede Vico.

Árbitro: Soto Grado (Comité de La Rioja).

Estadio: El Alcoraz.