Rebelde y polémico hasta el final. Alexander Mostovoi no cambia. Es incorregible. Tanto que al seleccionador Georgi Yartsev se le agotó ayer la paciencia y decidió, tras reunirse por la noche con los dirigentes de la Unión de Fútbol de Rusia, expulsar al zar de la concentración por criticar los duros métodos de preparación de la Eurocopa utilizados por el veterano entrenador ruso. Mostovoi ni siquiera se subió ayer al autocar del equipo para viajar con sus compañeros desde Vilamoura hasta Lisboa. El zar se quedó en el hotel del Algarve, hizo la maleta y viajó por la tarde hasta Vigo. Punto final. Ya no volverá a la selección. Y quién sabe si también ha escrito el último capítulo de su carrera deportiva. Mostovoi, que ya ha anunciado que no piensa seguir en el Celta tras el descenso a Segunda, quería hacer una buena Eurocopa para que el Spartak de Moscú, con quién está en negociaciones, se convenciera de que a los 35 años todavía es un futbolista válido para la emergente Liga rusa. Un torneo que se mueve por el impulso de los dólares de las empresas del petróleo, del gas y del acero.

Visión pesimista

Mostovoi lo tendrá ahora un poco más difícil para seguir jugando, y todo por denunciar que Rusia ya no tenía "ninguna opción de clasificarse" tras perder con España. Estas fueron las palabras, llenas de pesimismo, que más molestaron a Yartsev. Incluso más que las pronunciadas contra sus métodos: "Perdimos con España porque nos faltó frescura debido al intenso trabajo físico que hemos hecho desde que llegamos a Portugal bajo un calor insoportable". Por eso a Yartsev, máximo goleador de la liga de la URSS con el Spartak en 1979, no le quedó otra salida que expulsarlo del equipo pese a que fue él mismo quien le convenció para que regresara.

"Su presencia era inoportuna. En lugar de asumir el papel de líder ha preferido culpar al técnico", declaró Yartsev. El malestar de Mostovoi no es nuevo. Nació el día en el que el seleccionador prescindió de su amigo Onopko. El exjugador del Oviedo se lesionó en la rodilla días antes del torneo y Yartsev decidió no esperar a que se recuperara para utilizarlo en el tercer partido de la primera fase. Eso indignó a Mostovoi.

Su expulsión cierra una temporada repleta de incidentes en el Celta. Llegó una semana tarde en verano y con cinco días de retraso en Navidad, se enfrentó al presidente Horacio Gómez y se asegura en Vigo que amenazó a Ramón Carnero, sustituto de Antic, porque no jugaba. Un triste final para un artista del balón que ha cambiado desde la marcha de Karpin a la Real y la separación matrimonial.