El Sevilla se llevó los tres puntos en juego de Mestalla en un partido alocado, en el que hubo goles, expulsados, decisiones arbitrales polémicas y en el que el Valencia no supo mantener la ventaja que cobró en el marcador. Con esta derrota, el equipo de Claudio Ranieri, que mantiene la segunda plaza, deja escapar en la clasificación al Barcelona, ahora líder destacado con cinco puntos de ventaja.

Ambos equipos protagonizaron un intenso comienzo de partido. Cortados por un patrón similar, tanto valencianistas como sevillistas buscaron la portería rival, si bien en los metros finales no estuvieron muy finos ni unos ni otros. El que más cerca estuvo de lograr su objetivo fue Renato, quien poco antes del primer cuarto de hora lanzó una falta picada y ajustada al poste que puso en dificultades a Cañizares, si bien el meta internacional respondió con una notable intervención.

El partido no perdió su intensidad, y aunque el choque no tenía un dueño claro, fue el Valencia el que gozó de una buena oportunidad para abrir el marcador. Un lanzamiento desde fuera del área del italiano Fiore que no atajó Esteban, sirvió para que su compatriota Bernardo Corradi estrellara el balón en el larguero tras el rechace del meta.

IGUALDAD Hasta el final de este periodo se mantuvo la igualdad de fuerzas, ya que el Valencia lo intentaba pero se encontraba con las dificultades del centro del campo y defensa sevillista, mientras que la formación de Caparrós buscó también los dominios de los locales aunque sin alcanzar los metros finales.

Los sevillistas empezaron bravos la segunda parte. Un despiste defensivo valencianista propició que Aranda encarase en solitario el

área local aunque Cañizares respondió con la parada de la noche. El trabajo del conjunto de Caparrós era notable, pero la suerte le fue esquiva en el gol que inauguró el marcador. Un pase de Corradi fue desviado a portería por Aitor Ocio, sin que esteban pudiera hacer nada para retener el balón.

Acto seguido, el Sevilla volvió a gozar de otra gran ocasión a balón parado pero Cañizares, con otra soberbia parada, repelió el lanzamiento del brasileño Julio Baptista, quien no fallaría en su siguiente ocasión, cuando encaró en solitario la portería e igualó el marcador.

Tras el gol sevillista, el partido se complicó. Entradas duras, expulsiones de Baraja y Daniel Alves, continuas interrupciones del juego, decisiones arbitrales protestadas por unos y otros lo que ayudó a que el fútbol desapareciera por completo. Aranda se benefició de este desconcierto para desnivelar y dar la vuelta al marcador a la salida de un córner. El Valencia, a la desesperada, buscó el empate con el argentino Pablo Aimar en el campo pero sin suerte, ya que el Sevilla no pasó por apuros en los últimos instantes.

POSIBLE RECURSO El Valencia estudia presentar un recurso ante el Comité de Competición por alineación indebida de Aranda, que saltó al césped cuando ya había sido sustituido tras lesionarse.