Salir goleado no es un resultado anómalo cuando un equipo juvenil visita Lezama. El Oliver lo sabía, pero no por eso quiso que su desplazamiento al campo del Athletic fuera un trámite. Los zaragozanos plantaron cara a uno de los mejores equipos del grupo y, aunque el resultado reflejara finalmente un 4-1 desfavorable, vendieron cara su derrota.

El Oliver logró que el marcador no se moviera en los primeros 30 minutos, en los que envió un tiro al palo y dispuso un uno contra uno con el portero bilbaíno. Sin embargo, en cinco minutos, el Athletic materializó tres goles con los que rompió el partido. En el descanso, también se mantuvo la igualdad. Los locales lograron aumentar su renta, pero el Oliver logró el regalo del gol por medio de Jon.