Tanto el grupo de ocho empresarios aragoneses que representa Mariano Casasnovas como la vía abierta por un inversor alemán y que tiene en Javier Láinez a su cabeza visible calificaban ayer a este diario a esta semana como la definitiva, deslizando por separado una misma fecha, hacia el miércoles o el jueves en ambos casos, para saber cuál va a ser el desenlace de esta compra-venta interminable que Agapito Iglesias se esfuerza en alargar, no se sabe aún con qué intención. De hecho, el soriano, en su círculo íntimo, no desliza con tanta seguridad que esa venta de su paquete accionarial, en torno al 94%, se vaya a producir sí o sí. Y hasta ha realizado movimientos de cara a la plantilla del curso próximo, señal de que no está tan convencido de irse.

Pero la necesidad del Zaragoza, que requiere entre 7 y 9 millones antes del 30 de junio, si bien algunos de los pagos son negociables y eso dejaría la cantidad imprescindible en unos 5, y los problemas de Agapito con la Justicia por el caso pagarés le han dejado en un callejón sin salida. Ha asegurado a quien le ha querido oír que vende porque no quiere poner más dinero. La realidad es que con la amenaza del Juez por el embargo no puede poner esas cantidades que el club necesita. Pero siempre hay vías, ampliaciones de capital o vericuetos para seguir. Y Agapito aún no ha descartado del todo la idea de continuar. Quizá no en el primer plano, pero, ¿y en el segundo, tras las bambalinas?

OFERTA FAVORITA En todo caso, las dos ofertas de compra que a estas alturas tienen más o menos cara y ojos reconocibles, aunque pocos datos concretos, al menos públicamente, esperan que el proceso no se dilate ya más, que se lleve a cabo a lo largo de esta semana. Lo cierto es que Agapito solo considera a una de ellas, solo se refiere en los últimos días a la comandada por Casasnovas, señal de que tiene muy claro a quién vender en cuanto dé el paso definitivo de hacerlo, de estampar su firma en el contrato de compra-venta y, además, muestra de que la presencia de Javier Láinez, opositor declarado a la gestión del soriano en los últimos tiempos, ejerce de problema para que la opción alemana no sea vista con buenos ojos por el dueño de la SAD, por el máximo accionista.

El grupo de Mariano Casasnovas aseguró ayer que el sábado mantuvieron, no todos sus representantes, pero sí una parte, una reunión en Madrid con Agapito Iglesias en la que se dejó perfilado todo, listo ya solo para la firma. Esperan que se produzca entre el miércoles o el jueves, en una notaría madrileña, como es el deseo del soriano. Y aseguran que esos tres días de plazo vienen por problemas de agenda de todos los empresarios, porque todos deben estar, o al menos desean estar, y no firmar por poderes, de forma presencial en la firma por la que el Zaragoza pasaría a sus manos.

MÁS PRUDENCIA Este grupo de empresarios aragoneses, que podría llegar hasta 11 porque hay tres más pendientes de la firma para adherirse al proyecto, ha puesto a disposición de Agapito un aval de hasta ocho millones de euros para poder cerrar los pagos que hay que hacer en el límite que marca el 30 de junio. Y, aseguran, en la disponibilidad de ese aval no radica el problema, sino en la compleja redacción de los contratos, para dejar todo bien atado, quizá también una posterior salida, porque este grupo asegura que su proyecto deportivo y en el club sería por unos 4 años. Además, el acuerdo con Agapito, por sus acciones, rondaría los 9 millones de euros, la mayoría a pagar a ocho años y solo una pequeña parte, inferior a dos millones, en el momento de la firma. Eso, en la teoría, en lo que se conoce, claro, porque este grupo proclama desde hace dos semanas que el acuerdo está muy avanzado y éste se sigue sin firmar, muestra de ese carácter interminable del proceso.

Mientras, en el grupo con capital alemán que representa Javier Láinez el optimismo siempre ha sido más moderado, con una mayor prudencia, pero se recalca que siguen ahí, con opciones y se asegura que su viabilidad económica estaría más que garantizada. Desde esa propuesta se dio de plazo hasta el viernes pasado a Agapito Iglesias y ahora aún se mantiene la oferta, a sabiendas de que el soriano no ve con buenos ojos esta opción. O no la ve. Con todo, coincide con el otro grupo en que a mediados de esta semana habrá desenlace. ¿Será de verdad la definitiva esta vez?