--¿Dan un poco de vértigo dos títulos y un liderato?--Esta temporada lo único que hemos hecho ha sido ganar la Supercopa al Valencia. En realidad no hay nada más. Estamos empezando y la conquista de la Copa ante el Madrid es cosa del pasado. Por eso hemos de ser consecuentes y tener el suficiente grado de humildad para saber que la Liga acaba en junio y que el Real Zaragoza es un equipo medio. Si hacemos las cosas bien estaremos un poco más arriba y si no es así, tendremos problemas, quizá luchando por evitar el descenso. Es una propuesta lógica que la entiende todo el mundo. Nosotros debemos mantener la ilusión para ver hasta dónde somos capaces de llegar.

--¿Y para usted? ¿No va todo demasiado deprisa? Vino para salvar al equipo y ya es historia como entrenador del club en apenas seis meses. Puede que a este ritmo suban las exigencias.--En el aspecto personal simplemente he cumplido objetivos. Lo fundamental era mantener la categoría y se cumplió. Las exigencias me las marcó yo por mi forma de ser. Transmito a los jugadores que el Real Zaragoza tiene que jugar para ganar con el mejor fútbol posible y luego ser eficaz, que es lo más difícil. Tengo un grupo homogéneo en el que cualquiera puede jugar. Están preparados porque tienen confianza en sí mismos y sabemos a qué jugar.

--Por lo que se desprende de sus palabras, uno de sus principales objetivos ha sido situar a la plantilla en el marco de la realidad.--Sí. Cada uno ha de conocer bien las prioridades del equipo, conocerse a sí mismos. En función del rival, de la competición y del momento todo variará.

--El Real Zaragoza tiene su firma, pero no tiene nada que ver con el fútbol de autor, con la reivindicación constante de que el entrenador es la estrella.--Quien venda el fútbol de un técnico se equivoca. El fútbol es de los futbolistas y con un estilo que lo define el tipo de jugadores de los que dispones. El jugador es el gran protagonista con la idea, por supuesto, que propone el entrenador teniendo en cuenta todas las variables que se dan en diferentes escenarios y contra diferentes rivales.

--En el Real Zaragoza se escucho: "Quien quiera ver espectáculo que se vaya al circo". ¿Qué opinión le merece esa frase?--Me la han comentado muchas veces. Yo creo que hay que respetar al público. Lo que ocurre es que hay que analizar esa frase dentro del contexto de las circunstancias del momento en que se dijo. Yo prefiero no analizarla. Insisto en que debe darse un respeto por la afición, por el fútbol y por el espectáculo. Pero, ojo, siempre ganando, porque si no es así al entrenador lo echan.

--Osea que la meta es ganar.--Claro, en el fútbol profesional es así. Lógicamente hay que buscar los medios adecuados. Si puedes ganar jugando bien, formidable. No hay que separar estos dos conceptos.

--La victorias del Oporto en la Liga de Campeones y de Grecia en la Eurocopa, ¿han sido dos grandes castigos para el fútbol como entretenimiento?Pasa a la página siguiente