Cinco jornadas ya de Liga y el mensaje de Víctor todavía habla de mucho trabajo por hacer: "Estamos todavía en formación, tenemos que evolucionar", señaló el entrenador, consciente de que la atípica pretemporada y la formación de la plantilla a contrarreloj son aspectos difíciles de solventar. "Estamos aún viendo las mejores características y cómo nos tenemos que adaptar a todos los futbolistas. Debemos evolucionar en la seguridad defensiva, que nos hagan gol con mucha dificultad, y crear y tener juego y oportunidades".

El caso es que hasta ahora la evolución como bloque no ha sido la esperada, aunque al menos ante el Alavés se logró ganar por primera vez: "El triunfo fue muy bueno para la afición, para que aparezca otra vez la ilusión, pero también para recompensarnos por el esfuerzo que hacíamos y que no veíamos que llegara el fruto. Ese triunfo no supone un punto de relajación sino de motivación para seguir en la línea". Y la mejor manera de seguir es aumentar el estrenado casillero victorioso ante el Llagostera. "Dos seguidos sería magnífico, formidable para todos. Si una victoria ya supone tanto, dos sería extraordinario", dijo.

Rechaza Víctor que su Zaragoza espere a los rivales, aunque tampoco destaque ni mucho menos por su capacidad en la creación. "No podemos jugar a la contra porque tampoco tenemos jugadores excesivamente rápidos. Debemos dominar el juego, atacar y tener el balón en la medida de lo posible. Esta Segunda es difícil, la mayoría de equipos hace un fútbol directo y no te deja jugar. Ante el Alavés en la segundo mitad ya hicimos algo que queríamos hacer, dominar la situación y crear peligro".

Reconoció que la lesión de Vallejo "trastoca los planes", aunque se mostró confiado en que al ser una molestia leve la semana que viene ya esté con el grupo. "Y tenemos varios centrales con solvencia para poder jugar". En Palamós lo hará Rubén como pareja de Mario. Así, el equipo que salga de inicio sería el que empezó la segunda parte con el Alavés, cuando Eldin y Rubén suplieron a Nieto y a Vallejo.

Víctor valoró el amistoso de ayer como "intenso" y válido para ver los jugadores que no están actuando tanto ante "un rival que estaba muy motivado. Algunos han podido tener 90 minutos y otros 45 pensando en el sábado". Ahí espera un Llagostera que acaba de ganar al Barcelona B. "Es un bloque consolidado y que ha empezado muy bien. Saben a qué juegan y van a dar mucha guerra" este curso.