Víctor Muñoz ha calificado su regreso como entrenador al Real Zaragoza, ocho temporadas después, como "un reto profesional y sobre todo un reto sentimental", sobre todo éste último lo ha dejado claro nada más pronunciarlas cuando se ha tenido que tomar unos segundos de respiro.

"Siempre he venido al Real Zaragoza en situaciones muy difíciles y no he tenido la suerte de preparar al equipo en condiciones normales, también cuando debuté como jugador. Ahora es una situación más compleja", ha afirmado en sus primeras palabras como técnico del equipo aragonés con el que se ha comprometido hasta junio de 2015.

Ha recordado que tras su no renovación con el equipo aragonés al final de la temporada 2005-2006 cuando se produjo la venta de acciones del máximo accionista Alfonso Soláns a Agapito Iglesias "siempre había dicho que no iba a venir a entrenar a Zaragoza y menos en Segunda División mientras estuviese Agapito".

"El Real Zaragoza está por encima de Agapito Iglesias, de Víctor Muñoz y de todos nosotros, y lo que queremos es seguir haciendo historia", ha afirmado.

No obstante ha calificado como "real" la circunstancia de que desde la llegada del empresario soriano a la entidad maña prácticamente todos los hombres que habían hecho historia han fracasado.

Su segundo compromiso como técnico con el equipo aragonés, el primero lo cerró con la conquista de una Copa del Rey y una Supercopa además de otra final copera, lo ha calificado como "un reto" en el es consciente de que puede tener "más a ganar que a perder".

"He aceptado este reto fundamentalmente profesional, pero aunque el Zaragoza representa a todo Aragón ahora está en Segunda División y me convierte en entrenador de Segunda", ha manifestado.

Víctor Muñoz tiene claro que el equipo zaragocista debe estar en Primera División pero en estos momentos "no miro a largo plazo quedan doce partidos pero solo tenemos que pensar en el próximo domingo", aunque también ha insistido en que "en deporte no hay que tener miedo a nada y todo es posible".

"El Zaragoza no puede estar donde está y tiene que mejorar. Tengo la mejor plantilla. No la puedo cambiar", ha comentado.

Desde su amplia experiencia tanto como futbolista como dirigiendo equipos ha indicado que en estos momentos el grupo necesita "tener confianza y solo se consigue con resultados".

Sobre su compromiso hasta el final de la temporada 2014-2015 ha asegurado que es para intentar devolver al equipo a Primera "si no es este que es muy difícil y complejo al año que viene habrá que hacer un planteamiento y las cosas bien. Ahora solo hay que pensar domingo a domingo y ver hasta donde podemos llegar".

El somero análisis que ha podido hacer en las poco más de dos horas que ya ha trabajado con sus nuevos jugadores ha dicho que se encuentran "en un momento bajo en el que todo parece oscuro y negro, pero hay calidad para mejorar la situación y la clasificación en que está".