Víctor Muñoz apareció tranquilo, incluso contento, en la rueda de prensa. Y es que las cosas empiezan a irle mejor al técnico. Si hace dos semanas contaba con menos de diez futbolistas del primer equipo, ahora los fichajes llegan a pares; si parecía que el equipo jugaría la primera jornada en cuadro, a la espera de aprovechar las gangas de la última semana del mercado de fichajes, el jueves se conoció que debutará al completo por el aplazamiento del inicio de la Segunda División, un percance que ha sido una bendición para el Zaragoza. "La sensación que tengo es que es mejor para nosotros, pero luego no sé si será mejor o peor. Nos va a dar, por lo menos, una semana más de preparación con la mayoría de jugadores que están llegando. Nos estamos adaptando un poco a las circunstancias especiales que el Real Zaragoza tiene esta temporada, como entrenar con gente más joven, gente que no estará durante el campeonato. Esto es una adaptación más que ya no es una cosa nuestra, sino que viene de fuera", explicó con sinceridad el técnico.

No obstante, no todo son buenas noticias. La probable readmisión del Murcia y una hipotética inclusión también del Castilla para completar la Liga --que contaría con 24 equipos-- dificulta la tarea de la dirección deportiva, que está interesada en varios futbolistas de esos equipos que podrían quedarse si sus clubs recuperan la categoría. "El mercado está abierto, pero igual algunos jugadores no pueden salir o los criterios de la gente que dirige esos clubs o de los compradores cambia", reconoció Víctor, que mostró su rechazo a una Liga de 24, algo que perjudicaría a una plantilla corta como la suya.

"Es un problema añadido. La Liga de Segunda ya tendría que ser de 20 o incluso de 18, como tendría que ser la Primera División. Imaginemos una Liga de 24... No me lo puedo ni creer. Yo creo que no, que seremos coherentes y no se aumentará dos equipos. Espero y deseo que no, pero después hay otros intereses en los que no quiero entrar y que desconozco. Podría interesar quizá que hubiera 24 equipos", advirtió el aragonés.

El técnico ya pudo trabajar ayer con la defensa, una línea que tiene casi cerrada, pero echa de menos refuerzos más adelante. Es simple: Víctor quiere a alguien que meta goles. "Ahora lo más importante son los atacantes, que, lógicamente, son fundamentales. Me gustaría tener los atacantes del Betis. No estaría mal, ¿no?", confesó. El equipo verdiblanco cuenta, entre otros, con Rubén Castro, Jorge Molina y Renella. "Los quiero tener cuanto antes. A ver si podemos contratar a los jugadores que nos gustaría; es complejo", admitió, antes de definir a Mario.

"Lo he tenido en el Getafe. Es un centro distinto al resto, explosivo, rápido, sin tanta envergadura", explicó, tras afirmar que contará con Paglialunga y Barkero hasta que se vayan.