Víctor Muñoz decidió apelar al pragmatismo a la hora de evaluar el valor de un empate final con sabor agrio después de rozar el triunfo ante el Racing de Santander. "El punto es bastante bueno, ya que sumar en la situación en la que estamos siempre es positivo. Es verdad que saboreamos los tres puntos y por eso hay una pequeña decepción, pero me quedo con el empate, porque significa seguir en esa línea para sumar los puntos que necesitamos para lograr la permanencia", aseguró el técnico zaragocista, que vio una parte para cada equipo en el análisis global del choque disputado en La Romareda.

La primera tuvo claro color del conjunto aragonés, muy superior en algunas fases a su rival. "Ellos apostaron por un fútbol directo, con balones largos a Bodipo, pero me quedo con el último cuarto de hora de mi equipo. Creamos tres o cuatro ocasiones claras de gol, aunque al descanso, lamentablemente, nos fuimos con sólo uno en el marcador", explicó Víctor Muñoz, que no tuvo problemas en reconocer que, en la reanudación, el Racing de Santander llevó todo el peso del juego: "Dominaron y fueron superiores, ya que crecieron en ánimo tras hacer su primer tanto".

LA CLAVE DEL ENCUENTRO Ahí situó la clave del empate final el entrenador zaragozano, en un gol racinguista que significaba apretar el marcador después del 2-0 que había logrado David Villa, porque "tras ese gol nuestro parecía que estaba todo hecho y nos faltó atención en ese primer tanto del Racing. Ahí estuvo la clave, ya que cambió el partido, porque tuvimos un actitud más conservadora que nos hizo jugar un poco peor, sin fluidez y sin llevar la iniciativa", explicó el técnico del conjunto zaragocista, que también admitió que los cambios desde el banquillo en la segunda parte habían aportado vivacidad al Racing de Santander, pero no a su equipo.

ALCARAZ, CONTENTO Tampoco pareció demasiado desilusionado Lucas Alcaraz, técnico racinguista, con el punto sumado en La Romareda. "Si cuando se pusieron con 2-0 en el marcador nos dicen de empatar, nos habría parecido impresionante. Estoy contento con la actitud de mis jugadores y con el diseño general que ha mostrado el equipo", afirmó el entrenador granadino.

Alcaraz hizo énfasis en el buen partido en líneas generales que realizó el Racing. "Los dos goles del Zaragoza habían sido un castigo bastante excesivo. Sin embargo, nosotros seguimos a nuestro ritmo y al final los chavales encontraron su premio, ya que el trabajo que realizaron fue encomiable", sentenció el preparador del conjunto cántabro, que también felicitó a sus futbolistas por la buena labor a la hora de contrarrestar la salida de balón zaragocista.