Cabizbajos y cariacontecidos. Así se marcharon los jugadores del Real Zaragoza de las instalaciones del Anxo Carro. La derrota en el último suspiro minó la moral del plantel, también para el siempre risueño atacante Vinícius Araújo. «Estoy muy triste por el resultado negativo, no nos queda otra que levantarnos y seguir trabajando», explicó el carioca. El exjugador del Valencia debutó en partido oficial con la elástica blanquilla: «Tengo que estar listo siempre para cuando el entrenador me necesite. Espero aportar goles y ayudar a vencer partidos». Vinícius concluyó asegurando que «el partido lo podíamos haber ganado los dos. Hay que ir siempre con coraje, ahora debemos recuperar estos puntos en casa».

Jorge Pombo volvió a estar cerca de anotar su primer gol de la temporada. En la segunda mitad, el zaragozano lanzó un potente latigazo que lamío el palo de la meta lucense. «Me he encontrado muy cómodo con muchas ganas, más que los goles me importa ayudar a que el equipo gane», aseguró el futbolista blanquillo. Pese a la derrota el discurso de la plantilla sigue siendo el mismo, confianza y trabajo en las enseñanzas de Natxo. Sensaciones esperanzadoras pero con aspectos aún por pulir. «Nos vamos con las ideas claras y con el trabajo bien hecho. Hemos tenido muchas ocasiones ante un equipo que ha hecho su partido. Debemos de confiar en el equipo», comentó el canterano blanquiazul. Pombo mandó un mensaje a la afición: «Estará dolida y disgustada, pero somos un equipo joven que tiene muchas ganas y ambición por hacer bien las cosas. Confiamos en mirar hacia delante».