No cabe más sufrimiento en un partido de baloncesto que el que pusieron Tecnyconta y Betis en el drama de ayer en Zaragoza. Cantó victoria por poco el equipo aragonés, que consiguió su objetivo de seguir vivo y dependiendo de sí mismo para continuar en la Liga Endesa. Ganó de forma agónica, agarrado a los puntos de Gary Neal, al trabajo interior de Bjelica y Rey, pero ni con una súper estrella, ni con dos refuerzos de Euroliga, ni con un pabellón ruidoso, pudo no ya estar tranquilo, sino pensar en recuperar el averaje al último clasificado. Durante muchos minutos pareció que ganar por más de tres puntos era una misión imposible. Y lo fue.

Era un día para ganar por encima de todo y al margen de cualquier otra consideración porque esa era la única vía para poder seguir en la ACB. Ahora el Tecnyconta tiene dos triunfos de ventaja sobre el Betis y uno sobre el Bilbao, que volvió a perder ayer. Tiene el averaje favorable con los vizcaínos y empatado con los verdiblancos, aunque con el general bastante decantado (145 puntos a su favor). Pero al Tecnyconta todavía le condenaría un triple empate entre estos tres equipos porque en la liguilla particular Bilbao tiene una victoria más.

La tensión, los nervios, estuvieron presentes durante los cuarenta minutos. El Betis dominó muchos de ellos porque la defensa del Tecnyconta fue tan blanda como de costumbre y su ataque fue erróneo en demasiadas ocasiones. Además, Gary Neal estuvo muy vigilado, sobre todo en la primera parte. Cada vez que recibía el balón tenía dos rivales encima, a veces hasta tres, por lo que en la primera parte apareció muy poco. Ahí se mantuvo el equipo aragonés con los rebotes de Rey, los puntos de Bjelica y poco más. Atrás fue un desastre. Quiso tapar a Booker, Schilb y Kelly pero le machacó Mikel Úriz con un 4/5 en triples. Fue la segunda unidad del Betis la que puso distancia en el marcador.

El equipo andaluz se agarró con uñas y dientes al partido y a la categoría. El Tecnyconta solo pudo superarle cuando encontró el acierto de tres, un periodo brillante en el tercer cuarto en el que consiguió al fin ponerse por delante en el marcador y lograr su mayor diferencia (57-50,min. 27). Fue un visto y no visto porque el Betis logró dos triples seguidos, un 0-9 de parcial y se marchó 62-65 al final del tercer cuarto.

Con todo por decidir los últimos diez minutos ninguno fue capaz de dar un paso al frente, prolongando la agonía hasta el minuto final. Bjelica, olvidándose al fin de tirar de tres, y Gary Neal, siempre Gary Neal, sostuvieron al equipo en un pulso que mantuvo la igualdad hasta el final. A falta de dos minutos el resultado era de empate a 74. Ennis pareció solventar el partido con un triple casi imposibla a 54 segundos, pero en la siguiente acción Schilb contestó con otro y los árbitros, además, le concedieron un muy protestado adicional. A 43 segundos del final el Betis estaba por delante (77-78). La solución fue sencilla, balón para Gary Neal y a la línea de tiros libres. Así ganó el Tecnyconta aunque concedió un triple para la prórroga que no entró. Así sigue vivo el equipo aragonés que, visto lo visto, no es poco.